La actriz Ana de Armas, se ha convertido una vez más en la embajadora de Louis Vuitton, esta vez, de la nueva colección de alta joyería de “Le Damier de Louis Vuitton”. Esta lujosa línea, que fusiona el icónico motivo Damier con un enfoque contemporáneo, destaca por su uso de materiales preciosos y su meticulosa artesanía. Con precios que oscilan entre 4,400 y 31,000 euros, la colección ofrece una experiencia única para los amantes de la joyería fina.
Louis Vuitton ha elevado su icónico motivo Damier a un nuevo nivel con el lanzamiento de “Le Damier de Louis Vuitton”, una exclusiva línea de alta joyería. Bajo la dirección artística de Francesca Amfitheatrof, esta colección transforma el clásico patrón de cuadros en una serie de piezas preciosas que combinan oro y diamantes, reflejando no solo la elegancia de las piedras, sino también el patrón distintivo.
Damier: el motivo de Louis Vuitton se reinventa en joyas
El motivo Damier, introducido en 1888 para distinguir los baúles de Louis Vuitton de los de la competencia, se reinventa en esta colección con un patrón de cuadrados alternados de oro y diamantes, manteniendo su esencia gráfica pero con un toque moderno y lujoso.
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Disponible solo en tiendas selectas, “Le Damier de Louis Vuitton” incluye anillos, pulseras, colgantes y pendientes, que la bella actriz cubana de nacimiento Ana de Armas sabe lucir con etérea belleza.
La colección ha sido diseñada por Francesca Amfitheatrof, la actual directora artística de joyería y relojería de la maison francesa, y encuentra su inspiración “en la Tierra, desde su nacimiento hasta la creación de la vida”, apuntan desde Louis Vuitton.
Las más de 95 piezas únicas de la colección se dividen en 13 temas que tejen una “profunda historia de metamorfosis, vida y herencia terrestre”, indican desde la casa fundada en París. A su vez, estos 13 temas se dividen en dos capítulos: Geología y Vida.
La colección incluye un número récord de piedras preciosas, según la marca de lujo francesa, entre las que destaca el collar ‘Bones’, la pieza más compleja jamás realizada por Louis Vuitton, que requirió 4500 horas de trabajo. Este está compuesto por un ópalo australiano de talla ovalada de más de 43 quilates, una turmalina Paraiba de talla pera de 20,93 quilates, casi 100 quilates de tanzanitas de talla esmeralda y diamantes blancos.