Cuando se trata de propuestas gastronómicas que logran capturar la verdadera esencia de la comida mexicana como nadie, es inevitable mencionar a Ramona, el restaurante insignia de NIZUC Resort & Spa, que se ha encargado de celebrar las tradiciones culturales y culinarias de nuestros antepasados y convertirse en un referente de la cocina del país.
Inspiración auténtica
Ramona, nombrado en honor a la esposa del fundador de Grupo Brisas – la cadena hotelera mexicana a la cual pertenece NIZUC- fue concebido como un espacio de lujo para degustar lo mejor de la genuina cocina mexicana a través de un selecto menú basado en sus tradiciones y raíces ancestrales. Sus platillos abarcan una significativa muestra de la riqueza gastronómica del país con un toque contemporáneo: del norte al sur y de lo prehispánico a lo moderno.
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Los ingredientes son el secreto
Cenar en Ramona es una experiencia llena de exquisitas sorpresas al paladar y los sentidos. Sin duda, la mejor manera de disfrutarlo es dejándose guiar por las recomendaciones de su talentoso Chef Irving Cupul que, inspirado por sus raíces y sus viajes a través de México, el introduce su pasión culinaria al menú aprovechando los ingredientes que le brinda la naturaleza: desde los productos más frescos de cada temporada y hechos de forma artesanal, hasta hierbas y especias cultivadas en el propio jardín del restaurante.
Un menú único
Ramona reúne toda la inspiración de las distintas regiones culinarias de México en un menú degustación de 12 tiempos que celebra su riqueza culinaria. Entre los platillos estrella de su exquisita propuesta están el Pulpo Maya al Carbón, el Cerdo Pelón Confitado, los Fideos Secos con Escamoles y la Barbacoa de Short Rib. El menú también cuenta con exquisitas y variadas opciones vegetarianas.
El sabor de la distinción
Recientemente, Ramona fue galardonado con el Premio al Mérito Restaurantero “César Balsa” como Restaurante de Hotel del año 2024 por la CANIRAC, el premio con el reconocimiento más alto dentro del sector gastronómico desde hace 33 años y que concede la distinción a aquellas personas y restaurantes que enaltecen la industria culinaria de México a través de su creatividad, servicio, excelencia y liderazgo.
Más allá del banquete
Por si fuera poco, Ramona está ubicado en un espectacular espacio que se abre al mar con pavimento de piedra natural y un pórtico del estado de Michoacán que data del siglo XVII. Detalles memorables como los candelabros, el techo abovedado y la cava de vinos complementan la réplica de un mural del Monasterio Agustino de Malinalco del siglo XVI que envuelven a sus invitados en un cálido ambiente.
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