Deportivo y de alto rendimiento: el Chevrolet Corvette de la división de General Motors es un emblema dentro del automovilismo estadounidense. Objeto de deseo y admiración para muchos por sus líneas y su fuerza, varios modelos fueron protagonistas de escenas icónicas dentro del cine mundial conviertieon al Corvette en una suerte de ídolo al que venerar.
El cine entonces ha puesto a este legendario auto deportivo como compañero de viaje de héroes, villanos y espías, al punto tal de identificar a estos personajes directamente con su vehículo.
Uno por uno, los 5 Corvettes protagonistas de escenas imborrables del cine
- Corvette Summer (1978): una persecución sin respiro
Mark Hamill, quien alcanzó la fama mundial como Luke Skywalker en Star Wars, protagoniza esta película de culto donde un joven obsesionado con los autos persigue su Corvette robado.
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Este no es un Corvette cualquiera, sino una versión radicalmente modificada, que incluye un volante a la derecha, es tan extravagante como excesivo,símbolo perfecto de la juventud rebelde y la pasión por la velocidad.
- Boogie Nights (1997): simbiosis entre el Corvette y su conductor
En Boogie Nights, el Corvette ’77 “Competition Orange” de Dirk Diggler, interpretado por Mark Wahlberg, es más que un simple vehículo; es un reflejo de su caída en espiral dentro de la industria del porno de los años 70 y 80 en el sur de California.
A medida que Diggler se corrompe y destruye, su Corvette se deteriora con él, representando la decadencia de su vida. Este icónico auto, con su color naranja y portaequipajes externo, es una metáfora visual poderosa del ascenso y caída de su dueño.
- Kiss Me Deadly (1955): el Corvette protegonista del cine noir
El Corvette ’54 en Kiss Me Deadly es uno de los primeros Corvettes en aparecer en una película. Conducido por el detective privado Mike Hammer, interpretado por Mickey Spillane, este elegante auto se convierte en un símbolo del cine negro de los años 50.
El Corvette luce impecable mientras recorre lugares icónicos de Los Ángeles, como el funicular Angel’s Flight en Bunker Hill. La película, dirigida por Robert Aldrich, es una obra maestra del cine noir, y el Corvette ’54 añade un toque de elegancia y modernidad a la trama.
- Con Air (1997): la escena de culto de la destrucción de un vehículo
Con Air ofrece una de las escenas más memorables de destrucción automovilística cuando el Corvette roadster del 67 del agente de la DEA Duncan Malloy (Colm Meaney) es arrastrado por el aire por un avión C-123.
La impactante escena culmina con el Corvette estrellándose frente a Malloy y el alguacil estadounidense John Cusack, quedando destrozado como un huevo. Aunque los efectos especiales de la época no eran perfectos, la destrucción de este Corvette sigue siendo una de las escenas más icónicas del cine de acción.
- La espía que me achuchó (1999)
En la secuela de Austin Powers, la agente de la CIA Felicity Shagwell, interpretada por Heather Graham, conduce un Corvette roadster de 1965 espectacularmente cubierto con la bandera británica.
Este auto, un contrapunto al Shaguar de Austin Powers, es el vehículo perfecto para un espía encubierto. Con su diseño llamativo y su potente motor, el Corvette de Shagwell se roba el espectáculo, siendo una de las vistas más memorables de la película, solo superada por los icónicos atuendos de la agente.