Los vuelos supersónicos siempre ha alterado el concepto del tiempo al permitirnos volar a través del Atlántico y aterrizar antes de la hora de salida programada. Sin embargo, el fabricante de aviones Boom logró alcanzar nuevas cotas de ironía temporal con la última versión de su avión supersónico Overture.
Su diseño conforme a la producción revelado recientemente en el Salón Aeronáutico de Farnborough en el Reino Unido ha logrado hacer retroceder el reloj a la década de 1960 y parece asombrosamente similar al Concorde. Enormes alas delta, cuatro motores colgantes y un fuselaje largo y delgado hacen que sea difícil evitar una comparación.
Pero dadas las seis décadas de innovación tecnológica desde que los diseñadores franceses y británicos escribieron la historia del primer avión supersónico del mundo, Boom ha podido introducir algunas mejoras.
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Overture, el avión supersónico del futuro
El Overture tiene una cola convencional, su ala tiene un giro sinuoso y los motores turbofan de derivación media eliminan la necesidad de postquemadores, que fueron responsables de una parte sustancial de los niveles de ruido que ayudaron a matar al Concorde.
Evitar los dispositivos de poscombustión también genera dividendos en el consumo de combustible. Ahora Boom está haciendo un guiño por separado hacia la sostenibilidad al prometer que sus motores funcionarán con combustible de aviación 100 por ciento sostenible (SAF).
El avión supersónico de Boom tendrá una velocidad crucero Mach 1.7 sobre el agua, una altitud de 60,000 pies, un alcance sin escalas de 4250 millas náuticas y una capacidad de hasta 80 pasajeros entusiastas de la velocidad.
Boom también promete factores sorprendentes junto con la tecnología, al menos para los nerds de la aviación.
El fuselaje está optimizado para la eficiencia aerodinámica al ser ligeramente más grande en la sección transversal en la parte delantera que en la trasera.
La puerta donde abordan los pasajeros se encuentra en esta sección más grande, lo que dará una sensación de amplitud al comienzo de las experiencias de supervelocidad de las personas.
Recordemos que el Concorde era un avión angosto y con poco espacio para la cabeza que era fabuloso porque era rápido, no porque fuera lujoso o cómodo. Las ventanas también son mucho más grandes que las del primer avión supersópnico.
Más allá de los vuelos comerciales
Si bien Boom ha descartado una versión de combate completa, se ha asociado con Northrop Grumman para comercializar una variante para fuerzas militares y gobiernos para un transporte y logística rápidos.
Dado que el límite de velocidad terrestre de Mach 1 está determinado por las regulaciones en lugar de la capacidad física, el comando militar podría encontrar útil tener un medio de transporte de personal y equipo que pueda duplicar la velocidad de los aviones convencionales en tiempos de emergencia.
Boom dijo que el primer vuelo de su avión con especificaciones de producción está programado para 2026. Ya tiene 70 pedidos, con opciones de aerolíneas como United y Japan Airlines. Por el contrario, solo se construyeron 26 ejemplos de Concorde y solo 14 entraron en servicio.
¿Tendrá éxito este avión supersónico donde fracasaron otros como el Concorde y otro constructor más reciente, Aerion? Quizás.
Una combinación de tiempos de vuelo radicalmente más cortos (de Nueva York a Londres en 3.5 horas en lugar de 5.5 ahora, y de Tokio a Seattle en 4.40 en lugar de 8.30) y operaciones neutras en carbono podrían permitir que el Overture de Boom aproveche finalmente el potencial comercial de los supersónicos, mientras que Concorde solo dio una tentadora visión del futuro.