No más sombreros y botas, Texas tendrá una nueva identidad ante el mundo e irá firmada por Dior. Hablamos de la explosiva colaboración entre el director artístico de la Maison francesa, Kim Jones, y el hijo pródigo de Houston, el rapero Travis Scott, que inspirados en las áridas tierras de ese estado americano han lanzado la colección Summer 2022.
Christian Dior viajó a América en 1947. Y uno de sus primeros destinos en esta odisea fue Texas, cuyos paisajes extraordinarios causaron una impresión duradera. Hoy, Kim Jones ha retomado esa conexión profunda como inspiración y decide fortalecer los lazos de la marca con el estado a través de una colaboración muy especial con el rapper, cantante, compositor de canciones y productor de grabaciones de origen texano, Travis Scott.
Dos visionarios unidos en un viaje por el desierto
Jones ha llevado a un nuevo nivel sus colaboraciones con esta colección que presenta la mente visionaria de Travis Scott, un artista y compositor nominado al Grammy, pero además, productor, empresario y diseñador que se ha convertido en uno de los personajes más creativos e influyentes de esta generación y de los artistas líderes del hip-hop.
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La colección presentada está inspirada en el lugar de nacimiento de Scott, Texas, en la que se mezcla con los dioses del rap y la iconografía del viejo oeste. El viaje inicia en Normandia, en el jardín de rosas del museo de Christian Dior, pero pronto este escenario se transforma en un desierto de Texas adornado con Cactus.
De hecho, la colección se basó en el legado de una década de Dior y la imagen más recientemente refinada de Scott, la fusión culminó en ‘Cactus Jack Dior’ un acrónimo que combina la casa de alta costura con el sello discográfico del rapero.
En esta colaboración, el diseñador, reflejando el saboir-faire de la casa, respalda la colección con el tailleur oblique dando un toque de formalidad para contrastar con los elementos deportivos; mientras que el músico ha reimaginado el logotipo dior a través de una serie de gráficos.
Los accesorios presentan un motivo Dior oblique revisado, la alforja también está reinterpretada con un asa de estribo sólido, y unos nuevos skickers de la marca evocan el universo del skateboarding. Pantalones de chándal, chaquetas entalladas, herramientas de vaquero, broches de corbata de bolo o bordados de soutache, tienden un puente entre la actualidad y el viejo oeste.
Los colores también están inspirados en el desierto: rosas descoloridas y malva, azules pálidos, un vibrante color chartreuse y tonos de los vestidos de gala de Dior de mediados de siglo.
Esta colección es una celebración para el menswear contemporáneo, agregando toques impredecibles como lo es el estilo texano.