¿Alguna vez escuchaste hablar del Romanée-Conti Grand Cru? Ya sabes, esa botella de Borgoña por la que cualquier conocedor mataría, ese vino conocido por ser el más caro del mundo. Bueno, pues si no las hecho… no te preocupes, es noticia vieja. Ahora, hay una nueva estrella en Francia.
Liber Pater anunció que en septiembre lanzará una colección de botellas del 2015 que costarán 34 mil 110 dólares cada una, lo cual pondrá fin al reinado del actual vino más caro del mundo que durante los últimos cinco años dominó con su precio de 20 mil 510 dólares.
Loïc Pasquet, fundador de Liber Pater, comentó que se producirán 550 botellas de las cuales solo se venderán 240. El resto serán almacenadas en su cava o guardadas para su hija.
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Quizá te preguntes a qué se debe el precio tan “modesto” que decidió poner Loïc Pasquet a su creación. En realidad, muchos expertos se preguntan lo mismo.
Para comenzar, al no producir vinos en el 2008, 2012, 2013, 2016 y 2017, la nueva etiqueta será muy codiciada por todos los fanáticos de Liber Pater que la querrán en su colección. En segundo lugar, la vinícola recurre a excéntricas medidas en la elaboración de sus vinos como el uso de uvas indígenas de viñas no injertadas y técnicas de elaboración del siglo XIX.
“Es el primer vino que podrá disfrutarse como si se estuviera en 1855”, comentó Pasquet.
Por supuesto, uno no puede hablar del vino más caro del mundo sin pensar en cómo sabe. Bueno, de acuerdo a Pasquet, este aporta una pureza impresionante y precisa al paladar con delicados aromas florales. Su final se prolonga hasta una conclusión sedosa.
El vinicultor explica que esta botella aportará notas olvidadas de vinos cuya fabricación terminó hace décadas pero, ¿crees que descubrirlas vale 34 mil dólares?