Desde 2010 el tenista español Rafael Nadal -número 4 del ranking ATP 2017- trabaja con la firma relojera Richard Mille para desarrollar relojes que se ajusten a sus necesidades.
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Por esta razón, nace el modelo tourbillon RM 27-03. Una pieza inquebrantable en cuanto a su resistencia a los golpes y con una precisión obtenida gracias al movimiento tourbillon, digna de la casa Richard Mille.
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En cuanto a sus características, el reloj se presenta en una caja de cuarzo pintada con colores tan llamativos como el amarillo y el rojo. No podemos olvidar el origen de Nadal y este es un guiño a la bandera española. Pero estos colores no son algo creado de manera baladí, ya que la técnica desarrollada para ellos merece mención propia:
Según explica el departamento de comunicación de Richard Mille, “La notable intensidad del colorido se ha obtenido mediante la impregnación de resinas teñidas en capas de sílice de apenas 45 micrones gracias a un procedimiento único en su género puesto a punto por North Thin Ply Technology y que permite intercalas dichas fibras antes de calentarlas a 120°C. Más concretamente, para obtener un nuevo color del cuarzo”. Además, la casa ha buscado también atender a las preocupaciones de biocompatibilidad y de inalterabilidad.
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Siguiendo con las especificaciones, la caja del RM 27-03 es sumergible hasta 50 metros y ofrece un ratio de resistencia/peso muy elevado. Pero lo que hace única a esta pieza es la resistencia de su calibre que puede soportar golpes de hasta 10,000 g. gracias a una complicación llamada péndulo de impacto y que permite simular las aceleraciones lineares que se generan con los gestos bruscos o los golpes recibidos al llevar el reloj. Además, cuenta con 70 horas de reserva de marcha.
Sólo se han fabricado 50 modelos de este reloj, y uno de ellos ya lo luce Rafa Nadal en sus partidos.