La famosa “Mano silla” y otras obras del artista Pedro Friedeberg son llevadas a la alta joyería

Melanóforis, que se refiere al instante preciso en el que un rayo de luz ilumina la oscuridad, es el nombre elegido para bautizar a la marca de alta joyería del artista y diseñador mexicano, Pedro Friedeberg, conocido, a nivel internacional, por su trabajo surrealista lleno de líneas, colores y símbolos.

Su pieza más conocida: la “Mano-Silla” ha sido llevada a diferentes lugares del mundo en distintos formatos y ahora se presenta en una de sus expresiones más pequeñas, pero al mismo tiempo más brillantes, como parte de una colección de alta joyería que rinde un homenaje a la trayectoria de este talento.

Melanóforis de Pedro Friedeberg

Melanóforis es un nombre griego lleno de significado espiritual, un rayo de comunicación que te transporta de lo negro y oscuro a la luz.

Video Recomendado

Así nace la nueva alta joyería de Pedro Friedeberg, que es más que una joya, un vínculo espiritual, con un contenido más profundo, lleno de mensaje.

Las piezas de esta primera entrega tienen un valor emocional más allá de ser una colección de oro y piedras preciosas. Contienen una reflexión y un significado. Hablan de lo racional.

Por ejemplo, las Manos representan la generosidad, la apertura, y la protección cuando llevan el ojo. El Babuino, la audacia, la intrepidez, la agilidad. La Luna, las emociones, el instinto, lo maternal, la creatividad. El Sol, es la vida, la belleza y la luz.

Realizadas con la máxima calidad en oro de 18 quilates, esmeraldas, rubíes, zafiros y diamantes de gran pureza y claridad, cada pieza ha sido trabajada por maestros orfebres artesanos.

Más de seis meses ha costado crear esta primera colección de joyas de Pedro Friedeberg, que se conforma de seis piezas, donde se han cuidado mucho los detalles, tanto de los materiales como en la precisión de las formas que el artista ha depurado y supervisado con esmero.

La creación del logotipo de la marca lleva la tipografía única del maestro, la escritura de su mano y cada joya va firmada con un diamante, pequeños detalles que se van descubriendo poco a poco.

La caja donde se presentan las joyas, una figura cúbica donde se superponen los cubos y cuyo diseño es ya, en sí, una obra de arte.

Todas las piezas creadas por Pedro Friedeberg son una extensión de su arte, que ahora se hace portable, y pasan a formar parte de quien la lleva.

Para aumentar su significado y exclusividad, las joyas son piezas limitadas; de 50 unidades, de 28, de 18 o de 9 ejemplares, en el caso del Babuino. Todas, numeradas con una correlación con la caja y el certificado de autenticidad.

Se harán tres lanzamientos al año y se presentarán cada temporada las nuevas creaciones de Pedro Friedeberg.

Las piezas van a estar a la venta por catálogo, on line y en puntos de venta Melanóforis. Gallery Weekend México del 3 al 7 de noviembre en Colima,160. Col. Roma.