Puede que se hayan quedado sin el codiciado anillo del SuperBowl, pero los Cincinnati Bengals se llevan a casa, como premio de consolación, un brillante reloj Casio G-Shock, con incrustaciones de diamantes, esto gracias a su mariscal de campo, Joe Burrow.
Esto, al menos, cada uno de los linieros ofensivos del equipo que, incluso antes de que ganara siquiera su pase para el máximo partido, fueron agasajados por el quarterback.
Los regalos de Joe Burrow
No pudo regalarles el Vince Lombardi, con el respectivo anillo de campeones del SuperBowl LVI, y ciertamente no dependía solo de él. Pero al menos, Joe Burrow, en la víspera de Navidad del año pasado regaló a los 13 linieros ofensivos de la plantilla del equipo relojes Casio G-Shock con incrustaciones de diamantes.
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Se trata de una versión personalizada de uno de los relojes más duraderos fabricados en los últimos 40 años que, según reportes de la prensa especializada, como ESPN, llevan incrustaciones de diamantes de 14 quilates, así como un pavé de oro blanco alrededor de la esfera del reloj.
La parte posterior de cada Casio GM6900SCM-1 tiene, además, el nombre del destinatario grabado, desde el abridor Hakeem Adeniji hasta jugadores del equipo de práctica como Lamont Gaillard.
Un gran gesto que suponemos no suple la satisfacción que les hubiese generado ganar el SuperBowl, sobre todo, porque lo tuvieron en sus manos y lo perdieron, literalmente, en el último minuto. Pero igualmente, un detalle que habla muy bien del joven Joe Burrow, quien, al parecer, también regaló algunas entradas para el gran juego.
Sí, de acuerdo con distintos reportes, el pasador de los Bengals, Joe Burrow, no se olvidó de quienes lo ayudaron a llegar a estas instancias y quiso reconocerlo invitando a quien fuera su head coach de preparatoria, Nathan White, al Super Bowl.
No cabe duda que además de un jugador con mucho futuro, Joe Burrow, es un ser humano con grandes valores y de muy buenos actos. Veremos qué grandes jugadas nos regala, en la próxima temporada.