Para 1968 Longines ya era un pionero en la tecnología de alta frecuencia pero aún había un hito que podía alcanzar y era el de crear el primer reloj sumergible con esta tecnología. No pasó demasiado para que el modelo se concretará llevando el nombre de Longines Ultra-Chron Diver.
Y como los clásicos siempre encuentran su camino de vuelta, Longines aplicó su experiencia fabricando movimientos de altas oscilaciones para diseñar el Longines Ultra-Chron, un modelo inspirado en el de 1968 haciendo eco en sus códigos y ADN.
Para este modelo se integró una tecnología de 10 oscilaciones por segundo, un logro que permite que este tenga el cronómetro más preciso.
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En términos estéticos se inspira en los códigos y funciones para buceo profesional del anterior reloj, incluyendo un bisel giratorio unidireccional, fondo y una corona atornillados, gran legibilidad y estanqueidad de hasta 30 bar (300 metros).
Completamente reconocible con solo un vistazo el Longines Ultra-Chron tiene una caja de acero de 43 mm en forma de cojín, un sello de Longines, se complementa con un bisel para buceo con inserto de zafiro con toques luminiscentes, así como una esfera en negro graneado con índices alternos cubiertos con Super-LumiNova.
Esta versión cuenta con un distintivo minutero rojo recubierto con Super-LumiNova, mismo material presente en las agujas de las horas para una perfecta visión aún cuando la luz es baja.
Haciendo latir este reloj se encuentra el calibre L836.6, el movimiento de alta frecuencia propio de la manufactura.
Pero para adentrarse un poco más en este movimiento hay que entender que se presenta en un movimiento cuya espiral oscila a 36,000 alternancias por hora (10 por segundo). Desde su introducción hasta el día de hoy se ha mejorado dotando de cada vez mayor precisión en los relojes.
La precisión del cronógrafo queda más que clara con su certificado ‘Ultraconómetro’ de TIMELAB, en donde se sometió a un proceso de cualificación y pone a prueba el cabezal del reloj en un periodo de pruebas de 15 días en distintos tests.
El Longines Ultra-Chron se puede llevar en la muñeca con una correa de cuero o pulsera de acero además de una correa negra estilo NATO hecha a partir de materiales reciclados.