El año de la Serpiente, de acuerdo con el calendario chino, ha brindado el marco perfecto para que Bvlgari desvele un hito evolutivo en su icónica colección Serpenti, que se reinventa incorporando un movimiento mecánico automático, Lady Solotempo BVS100, que lo convierte en un reloj completo, sin sacrificar su elegante presencia como la joya que sigue aumentando su apuesta por la feminidad.
Acudimos a la L.V.M.H WATCH WEEK 2025 para conocer de primera mano el nuevo movimiento automático Lady Solotempo BVS100, la culminación de años de meticuloso desarrollo, que marca un hito para la Maisonque que ha tenido que desarrollarlo, diseñarlo y producirlo porque ningún otro en el mercado cumplía con los criterios de tamaño y volumen requeridos para encajar perfectamente dentro de la forma icónica de la cabeza de Serpenti.
El calibre automático establece firmemente el estatus de Bvlgari como líder relojero dentro de la colección Serpenti, construyendo sobre una herencia de excelencia establecida por iconos como el Octo y Bvlgari Bvlgari.
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Lady Solotempo complementa perfectamente al Piccolissimo y al ultra- compacto BVL150 Tourbillon, uno de los tourbillones más pequeños del mercado, y mejora espectacularmente la versatilidad de Serpenti.
Serpenti cambia de piel de joya a reloj
La serpiente, con su simbolismo mítico, ha fascinado durante mucho tiempo a la Maison, cuyos orígenes están impregnados de arte y cultura grecorromana. Esta profunda conexión ha desbloqueado un reino infinito de creatividad. Inspirado inicialmente por el esplendor de las joyas romanas que usaba Cleopatra, Serpenti se reinventa continuamente, reflejando la esencia transformadora de la feminidad.
El Lady Solotempo BVS100 aumenta la fascinacion de Serpenti Seduttori y Tubogas. Estos nuevos talismanes presentan displays de horas, minutos y segundos, con el término “Automático” en la esfera como un guiño a su sofisticación mecánica.
Los acentos de diamantes en el bisel subrayan esta hazaña técnica, mientras que el fondo de caja de zafiro transparente revela el movimiento hipnotizante del peso oscilante.
Decorado con siete escamas inspiradas en las serpientes, el peso simboliza la renovación perpetua del reloj, impulsada por cada movimiento del usuario.
Reflejando este salto evolutivo, Bvlgari ha refinado el contorno sinuoso de la caja Serpenti. Sus curvas elegantes y fluidas irradian feminidad, mientras que la corona de rubelita tallada en cabujón ofrece una conexión táctil con la obra maestra mecánica interior.
Lady Solotempo: la mecánica de la eternidad
El movimiento automático Lady Solotempo BVS100 encarna la experiencia inigualable de Bvlgari en la relojería. Crear este calibre completamente nuevo no fue una hazaña menor; se basó en la experiencia de la Maison con movimientos como Solotempo y Finissimo.
Este calibre eficiente y elegante presenta una pantalla “Solotempo” (solo tiempo), indicando horas, minutos y segundos. Con solo 19 mm de diámetro y 3.90 mm de grosor, el Lady Solotempo pesa solo 5 gramos y, sin embargo, ofrece una impresionante reserva de marcha de 50 horas. Su diseño compacto y redondo se integra perfectamente en las curvas de Serpenti, al tiempo que sigue siendo versátil para otras creaciones de Bvlgari.
Se espera que el movimiento femenino BVS100, desarrollado y actualmente producido por Bvlgari en Le Sentier, se incluya en el futuro catálogo de movimientos internos disponibles para otras Maisons del grupo LVMH y que sea fabricado por Zenith en su Manufactura de Movimientos.
Fiel a su ADN como joyero, Bvlgari eleva el arte de la mecánica relojera. A través del fondo de caja transparente, el peso oscilante adornado con las icónicas siete escamas de Serpenti brillando como la piel de un reptil. Este intrincado motivo celebra la ingeniosidad detrás del movimiento, rindiendo homenaje a la rica tradición relojera de Bvlgari mientras destaca su elegancia distintiva.
Con el Lady Solotempo, Serpenti logra su transformación más atemporal hasta la fecha. Impulsado por la energía cinética de los movimientos de su usuario, este icónico reloj se convierte en un compañero constante, marcando con gracia el paso del tiempo y conectando generaciones.