Viajes de lujo: una nueva perspectiva

El sector del Turismo probó su capacidad de aguantar la peor crisis a la que se ha enfrentado, no solo recuperándose, sino reinventándose. Hoy veo en retrospectiva todo lo que ha logrado nuestra industria, y me entusiasma todo lo que aún está por venir.

La creatividad seguirá siendo clave para responder a las nuevas necesidades de los viajeros, permitiéndonos capitalizar tendencias emergentes que son las siguientes grandes apuestas para el sector. El mercado de los viajes de lujo es precisamente el que está disrumpiendo la industria y está en pleno auge.

Una nueva visión de los viajes de lujo

Según Allied Market Research, se espera que el mercado mundial de los viajes de lujo crezca hasta alcanzar casi 1.2 billones de dólares en 2027.

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Fotos: Cortesía Marriott

Sin duda alguna hay un cambio fundamental en la perspectiva de los viajeros y estoy convencida de que los viajes de lujo llegaron para quedarse.

Fueron largos meses en los que, relativamente, nadie se movió, pero todo cambió. Fueron millones de viajes cancelados, o aquellos que nunca se planearon por temor a ser cancelados, recordándonos que quizás dábamos por hecho los viajes.

Esto impulsó un cambio de mentalidad y nos llevó a replantearnos nuestras prioridades para el momento en que tuviéramos la oportunidad de salir al mundo nuevamente de manera segura y realizar nuestras vacaciones soñadas.

De hecho, el 55% de los encuestados por American Express está de acuerdo en que quiere reservar unas vacaciones únicas en la vida este año. Los viajeros están deseosos de experimentar esos destinos mágicos que nunca han visitado antes y que no quieren postergar más – aquí entra en juego el turismo de lujo.

Si me hubieran preguntado cómo definiría un viaje de lujo hace dos años, sin duda, mi descripción hubiera sido definitivamente distinta a la que podría dar hoy. Actualmente, este tipo de travesía no necesariamente tiene que ver con el número de hilos de las sábanas de la cama, sino más bien con el acceso a sitios y experiencias que representan todo lo auténtico y exclusivo de un lugar – una aventura personalizada es el verdadero lujo hoy en día.

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En Latinoamérica y el Caribe, las oportunidades para disfrutar experiencias de lujo son realmente infinitas pues hay un sinfín de maravillas que hay que ver al menos una vez en la vida: un río con los colores del arcoíris, selvas infinitas, glaciares majestuosos, templos de civilizaciones milenarias o el salar más elevado.

Además, nuestra cultura nos abre las puertas para vivir experiencias extraordinarias: en Perú aprender sobre el cóctel favorito del país: Pisco Sour; en México, disfrutar de masajes inspirados en las tradiciones curativas de la cultura azteca o una clase de cocina que celebra la tradición maya; en Chile, descubrir los magníficos Cabernet Sauvignon de la zona; y en el Caribe, disfrutar de exquisitas experiencias culinarias con una copa de champagne, o lujosas fiestas en yates bajo el atardecer caribeño.

No podemos hablar del turismo de lujo sin incluir a los programas de lealtad que proporcionan inspiración infinita para que los miembros sigan viajando y persiguiendo sus pasiones. Hoy en día podemos acceder a las experiencias más emblemáticas del planeta al ser miembros y ofertar por el acceso a experiencias VIP como disfrutar el Gran Premio de Mónaco desde un yate contratado por el Equipo de F1 Mercedes-AMG Petronas, u optar por un tour privado para visitar una de las siete maravillas del mundo: Machu Picchu. Son este tipo de experiencias elevadas las que fomentan la lealtad a las marcas. 

Los valores de los viajeros ya estaban en plena transición, y la pandemia reforzó este cambio. Se trata de un movimiento hacia las experiencias que priorizan la felicidad, pasiones, personalización y bienestar por encima de todo, sustituyendo el concepto de lujo como símbolo de estatus por el de experiencia de estatus.

Así que, volviendo a la pregunta original, yo diría que los viajes de lujo son más diversos que nunca y quien quiera sorprender a esta nueva clase de viajero debe tener como aliados a la imaginación, la innovación, la flexibilidad y el buen servicio.

Para los próximos años, ya no hablaremos de la industria del lujo, sino del mercado de la “excelencia cultural y la insurgencia creativa.” En este nuevo espacio las marcas ganadoras serán aquellas que tengan la visión necesaria para reimaginar el futuro, marcando la pauta para atraer al nuevo consumidor de lujo.

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Por ello Marriott International continúa empujando límites e incubando la innovación para ofrecer experiencias de primer nivel a través de su portafolio de ocho marcas de lujo.

Por mi parte, como la viajera ávida que soy, coincido con esta nueva visión y estoy muy emocionada por las sorpresas que nos traerá la industria de viajes.  

Nota escrita por: Diana Plazas- Trowbridge, Chief Sales and Marketing Officer de Marriott International en el Caribe y América Latina.

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