Estamos a un paso de alcanzar la segunda década del siglo XXI y, mientras las ciudades son devoradas por conjuntos habitacionales en una ola de brutalismo y minimalismo, un hotel boutique hace lo imposible por darnos un respiro y permitirnos disfrutar de un ambiente genuinamente vintage.
Casonas antiguas con mobiliario auténtico del siglo pasado y un cuidado por el detalle que te hará sentir que viajas en el tiempo. Bienvenidos a Pug Seal.
Con un concepto innovador, el objetivo principal es que el viajero conocedor se sienta en casa y viva una experiencia sensorial íntima que sólo puede ofrecer un hotel boutique de lujo aunado a la vibrante funcionalidad de un B&B.
Video Recomendado
Desde el momento en que haces check-in te olvidarás de sacar la cartera, ya que el desayuno gourmet a la carta (¡delicioso!), los soft drinks, los snacks todo el día, el café de olla y el internet están incluidos.
Esta colección de hoteles Boutique Bed & Breakfast ofrece no sólo privacidad y comodidad en sus habitaciones, sino una experiencia social en sus encantadoras áreas comunes en las que puedes convivir con personas de todas partes del mundo con intereses afines a los tuyos: inusuales y aventureros.
El diseño impecablemente cuidado y ecléctico de cada uno de los extraordinarios ambientes es lo primero que salta a la vista al entrar.
Mientras paseas por cada una sus espaciosas áreas te encontrarás con piezas de artistas y artesanos mexicanos e internacionales, litografías, mobiliario de autor, cuadros y candiles que consiguen un sincretismo de épocas y estilos exquisitamente bien logrado.
Un verdadero tesoro de hospitalidad y atención cálida y personalizada se esconde en cuatro casonas de ecléctico diseño: tres de ellas en la zona de Polanco (Anatole France 307, Allan Poe 90 y Tennyson 86) y una más en el barrio Del Carmen, en Coyoacán (1ª Cda. Belisario Domínguez 16), actualmente en remodelación para regresar este 2019 con un diseño espectacular.
La adquisición más reciente, Pug Seal Anatole France, aborda el concepto “Linaje”, y la decoración de sus 26 habitaciones refleja una espectacular mezcla de lo vintage y lo moderno como forma de homenaje a las familias europeas que migraron a México junto con sus costumbres.
Nota escrita por Erika Rivadeneyra, redactora de Robb Report México.