Elon Musk nos sorprendió esta semana en Twitter al confirmar que una de sus compañías, The Boring Company, había logrado el acuerdo verbal para construir el tren rápido Hyperloop que uniría las ciudades de Nueva York y Washington DC en 29 minutos.
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Siempre en su Twitter, Musk también señaló que habría paradas en Baltimore y Philadelphia y en todas ellas se crearían una docenas de entradas y salidas con elevadores. A pesar de sus declaraciones optimistas, el empresario hizo un llamamiento a sus seguidores para que éstos presionaran a sus representantes políticos en favor de la creación de Hyperloop One.
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No hace mucho tuvimos la oportunidad de ver cómo este tren que bien parece sacado de ciencia ficción completó y se probó en una pista prototipo de 500 metros en el desierto de Nevada con éxito.
“Realizamos muchas pruebas de componentes y simulación en nuestro Campus de Innovación en Los Ángeles, pero hay muchas preguntas que no podíamos hacer y respuestas que no podíamos obtener a menos que realizásemos pruebas de hardware real a escala. Tener DevLoop como un laboratorio al aire libre nos da una capacidad única para probar diversas tecnologías de levitación, propulsión, vacío y control“, explicó Bruce Upbin, jefe de comunicación estratégica de Hyperloop One.