Cuatro son los autos con lo que Rolls-Royce satisfará los deseos de sus clientes más ambiciosos, el primer capítulo fue La Rose Noire Droptail inspirado en la rosa Black Baccara, mientras que para la segunda la amatista, una gema de belleza inigualable, es la musa de Amethyst Droptail.
Encargándose de que el vehículo refleje el alma del cliente, esta versión fue encargada por un mecenas cuyo negocio familiar ha pasado de ser una boutique de piedras preciosas a una corporación internacional.
Su pasión por las joyas preciosas, automóviles y arte ahora se reúne en un mismo vehículo que a su vez se inspira en la hermosa gema elegida por ser la piedra de nacimiento del hijo del dueño y un símbolo inquebrantable de pureza, claridad y resistencia.
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En comparación con otras versiones con diseños intrincados, para el Amethyst Droptail se optó por el arte silencioso y adornos sutiles, pero no por ello menos lujosos.
Flores y gemas de amatista inspiran el nuevo Rolls-Royce
Pero no es el único objeto que se tomó como inspiración, el cocreador de esta versión buscaba celebrar el patrimonio cultural de su lugar de origen y la respuesta fue tomar la flor silvestre Globe Amaranth, la cual florece en el desierto.
Dicha flor está presente en la pintura de la carrocería, la cual con un efecto bitono captura las etapas de florecimiento, yendo de un tono púrpura suave con un matiz plateado al violeta intenso con una mezcla de copos rojos, azules y violetas que crearon un color malva único con un sutil brillo metálico.
A la luz del sol incluso el interior de las llantas revela este sutil toque de pintura malva que contrasta con la superficie de aluminio pulido espejo.
La cereza del pastel es un acabado sutil y complejo a la vez con fibra de carbono que tardó dos años en desarrollarse y se creó con un patrón de chevrón que agrega una decoración geométrica a las superficies.
También se incluyeron adornos en la parrilla Pantheon, mientras que el marco exterior de la parrilla y las piezas de las aletas están parcialmente cepilladas y pulidas a mano, un tratamiento nunca antes visto a esta escala.
El arte de Rolls-Royce siempre está en los detalles y la elección de los materiales y para Amethyst Droptail la selección comenzó con una madera Calamander Light de poros abiertos.
Para este modelo se creó la superficie de madera más extensa de la historia, elemento que se extiende desde el tablero y las puertas del auto hasta el panel del chal, apoyabrazos y la cubierta de la popa.
Por supuesto que un descapotable con madera en los interiores requería de cierto cuidado, así que esta se probó en distintos climas alrededor del mundo para cumplir con los estándares de resistencia.
Las hebras color caramelo de la madera inspiraron el tratamiento de cuero de los interiores que tiene una sutil laca nacarada que recuerda el brillo de la piedra que da nombre al auto.
Si aún no era suficientemente lujo las esferas giratorias de este Rolls-Royce se adornaron con raras gemas de amatista, mismas que también se encuentran en la figura del Espíritu del Éxtasis del exterior. Cada piedra tiene una profundidad única y son reservadas exclusivamente para joyería fina, aunque claro este modelo es una joya automotriz.
Al igual que el modelo anterior, este también está adornado con un reloj único encargado por el cliente que para esta ocasión es un Vacheron Constantin denominado ‘Les Cabinotiers Armillary Tourbillon’ que también permite retirarlo y guardarlo por separado.