Hay elementos que no pueden quedar exentos de las películas de Misión Imposible. Para empezar, no puede faltar Tom Cruise. Las escenas de acción y persecuciones son otro imprescindible y por último, aunque no menos importante, están los autos.
Muchos han sido los vehículos que han desfilado en cada una de las casi 7 películas de la franquicia de Misión Imposible, algunos se destruyeron y otros se usaron para algunas acrobacias, pero hay un par de ellos que se han robado la pantalla con su elegancia.
Ahora que está por llegar Misión Imposible: Sentencia Mortal, hagamos un recorrido por los autos más impresionantes que hemos visto en la franquicia.
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2003 Limusina Lincoln Town Car (Misión Imposible III)
Siempre que aparece una limusina en pantalla solo puede significar que alguien muy poderoso va en su interior, pues aunque usualmente estos enormes vehículos se rentan, solo los más adinerados tienen una en su garaje.
Esta Lincoln Town Car se usó para un secuestro en el que estaba involucrada la esposa de Ethan Hunt. Pero dejando de lado la trágica escena, este enorme vehículo es tan elegante en el interior como en el exterior, además cuenta con un motor V8 de 4.6 litros que brinda una buena potencia para escapar a toda velocidad.
Range Rover Serie IV (Misión Imposible: Nación Secreta)
Las SUV son el vehículo por excelencia de los villanos, pues tienen espacio suficiente para transportar a varios de sus secuaces y al mismo tiempo ir a toda velocidad.
Para Nación Secreta, el Range Rover Serie IV es el medio de transporte del Sindicato, una organización rebelde con la que Cruise debe acabar. La capacidad todoterreno del auto, su lujoso interior y el motor V8 de 5.0 litros que produce 375 CV lo hacen la combinación perfecta entre estilo y potencia para ir a toda velocidad por la calle.
Alfa Romeo 166 (Misión Imposible III)
¿Qué mejor sitio para manejar un Alfa Romeo que Italia? Para esta película Ethan se dirigió hasta este país para regalarnos una impresionante persecución en la que vimos toda la potencia de la que está hecho este modelo italiano.
El corazón que late bajo el capó de este sedán es un V6 de 3.2 litros que genera 240 CV y 213 lf-ft de torque, alcanzando una velocidad máxima de 152 mph.
BMW M3 (Misión Imposible: Nación Rogue)
Lo vimos en una persecución en Marruecos en la que Cruise estaba detrás del volante y nos dejó claro que este modelo es capaz de correr y si el momento lo requiere hasta bajar por unas escaleras, aunque no lo recomendamos.
Este deportivo de alto rendimiento tiene un motor biturbo de seis cilindros en línea de 3.0 litros que genera alrededor de 425 caballos de fuerza y 406 libras-pie de torque.
BMW M5 (Misión Imposible: Fallout)
El modelo aparece brevemente en el inicio de la película y después se puede ver más adelante en la base aérea de Ramstein. Gracias a su eficiencia no solo es perfecto para la acción y por su apariencia también es perfecto para el día a día.
El sedán tiene un motor V8 biturbo de 4.4 litros que producen 600 caballos de fuerza, con la capacidad de alcanzar la impresionante velocidad máxima de 155 mph.
Aston Martin V8 Vantage (Misión Imposible: Protocolo Fantasma)
Dubái siempre está lleno de los deportivos más increíbles, entre ellos vimos a la distancia este modelo que, aunque Ethan Hunt no lo condujo, sí lo iba persiguiendo, señal de que es el modelo indicado cuando necesitas conducir con velocidad.
Es un automóvil deportivo de lujo con un motor V8 de 4.3 litros que genera 380 caballos de fuerza y 302 lb-pie de torque.
BMW i8 (Misión Imposible: Protocolo Fantasma)
Al igual que el modelo anterior, este también se vio en Medio Oriente, específicamente en Mumbai, en donde destacó por su tecnología de vanguardia y su rendimiento para salvar el mundo de un misil nuclear.
Este es un auto deportivo híbrido futurista con un motor de tres cilindros turboalimentado de 1.5 litros y un motor eléctrico, que produce una potencia combinada de 357 caballos y 420 lb-pie de torque.
Lamborghini Gallardo (Misión Imposible III)
Nuestro intrépido protagonista condujo este modelo mientras salía del Vaticano haciéndose pasar por un traficante de armas. Y aunque en cuestión de minutos el auto se prendió en fuego, tuvimos suficiente tiempo para apreciar su incomparable belleza.
Este superdeportivo de alto rendimiento está propulsado por un motor V10 de 5.0 litros, que genera una enorme potencia de 520 caballos de fuerza y una asombrosa torsión de 376 libras-pie, su velocidad máxima es de 202 mph.
Fotografía destacada: Facebook – Misión Imposible