¿Cuánto dinero estarías dispuesto a pagar por una réplica de un Ferrari 330 P2 diseñado específicamente para niños? Aunque puede ser bastante caro, cualquier pensaría que no lo suficiente como para desembolsar 110 mil euros.
La compañía detrás de este mini superdeportivo italiano es De La Chapelle, una compañía francesa conocida por hacer replicas de autos con motores de BMW, Peugeot y Mercedes-Benz, que recientemente llevó a este Ferrari a la subasta de París en una cifra histórica.
El Ferrari 330 P2 original salió de Maranello en 1965 y fue el auto con el que Il Commendatore pretendía que fuera el campeón en Daytona y las 24 Horas de Le Mans. En su momento fue una auténtica revolución gracias a su motor V12 de 4.0 litros y los carburadores Weber que le daban una potencia de 410 CV.
Solo tres copias a lo largo de 1965 fueron construidas y se volvieron sumamente cotizados por los coleccionistas. Esta pequeña réplica fue fabricada en los 90’s con todos los detalles.
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El ejemplar lleva una placa con el número de serie ‘28’ y se dice que fue un encargo de un misterioso multimillonario que pidió que el ‘juguete’ llevará incluso el auténtico color ‘Rosso Corsa’ celosamente registrado por Ferrari.
El auto está en increíbles condiciones y es el juguete imprescindible para cualquier amante del fabricante de autos italiano.
En un inicio se preveía que la cifra en subasta oscilara entre los 5 y los 10 mil euros, sin embargo, el superdeportivo italiano llego a la cantidad de 110 mil euros, una cifra histórica pero también bastante considerable si se tiene en cuenta que este es un juguete perfecto y hecho a la medida para un pequeño y futuro aficionado a los autos.