Jascha Straub, diseñador principal de Sur Mesure, tomó nota cuando uno de sus clientes pidió un Chiron Super Sport que celebrara apropiadamente la historia de Bugatti. Hasta ese momento quería que representara todo el legado de la firma, pero cuando escuchó la leyenda detrás del Type 50S la idea se modificó un poco.
En aquel año Bugatti inscribió en Le Mans tres chasis separados, cada uno en un atractivo color negro en lugar del tradicional azul de carreras francés a modo de protesta al gobierno por negarles el apoyo, pero también como una metáfora visual al nuevo enfoque que adoptaban.
El regreso del legendario Bugatti Type 50S
Fue una victoria que se veía posible, pero no por ello dejó de ser sorprendente. El número ‘5’ se convirtió en una leyenda y en el catalizador que generó esta nueva versión: Hommage T50S.
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La parrilla se reinventó, convirtiéndose en el punto focal del diseño frontal, adoptando un diseño similar al automóvil histórico, aunque con algunas diferencias para completar con los requisitos aerodinámicos y de refrigeración.
Otro guiño al original es el color del exterior, un negro oscuro y brillante con un ‘5’ pintado en ambos lados del auto. Muchos más detalles están escondidos en todo el exterior; una inscripción ‘Le Mans 1931’ en el paso de ruedas trasero y una representación a la perfección del Circuito de la Sarthe oculto en la parte inferior del alerón trasero.
La historia se repite en el interior, salvo porque este tiene destellos de aluminio y “Perlée”, además de estar brillantemente iluminado por el techo de cristal Sky View.
También los paneles de las puertas tienen guiños a la historia del Bugatti Type 50S en Le Mans, recreando de forma casi idéntica una representación de lo que sucedió aquel día durante la carrera de resistencia; como toque final está un ‘Le Mans 1931’ cosido a mano en los reposacabezas de los dos asientos delanteros.
Pero el núcleo de este Hommage T50S es su motor de doble árbol de levas alojado al interior de un compartimiento tan elegante que parece que lleva una joya en su interior. Este singular espacio tiene un patrón ornamental en forma de motor, un sello distintivo por el que Ettore Bugatti fue reconocido.
Este patrón es llamado “Perlée” y emana por todo el vehículo como un recordatorio visual constante de su inspiración, una leyenda que continúa inspirando a Bugatti.