El hecho de que el champagne sea una industria milenaria no significa que sea sencillo producirlo, al contrario, la continua exigencia de excelencia es clave para diferenciar las mejores etiquetas. Por ello el Campeonato Mundial de Champagne & Vino Espumoso acaba de nombrar al Cuvée Dom Ruinart Blanc de Blancs 2010 de Maison Ruinart como el mejor champagne del mundo.
Creado en el año 2014 por el crítico y escritor de vinos Tom Stevenson, el Campeonato Mundial de Champagne & Vino Espumoso reconoce lo mejor de lo mejor en la industria de las burbujas.
Cada año la competencia revela su prestigiosa guía de champagnes y vinos espumosos, este 2022 los ganadores fueron presentados en Londres por un panel de jueces compuesto por Tom Stevenson, Essi Avellan y George Markus.
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Los enólogos de renombre mundial realizaron una cata a ciegas de cada uno de los vinos espumosos en competencia, coincidiendo en que Dom Ruinart Blanc de Blancs 2010 (presentado a finales del año pasado) sobresalió y era el absoluto acreedor al título del mejor champagne del mundo.
¿Qué hay detrás del mejor champagne del mundo?
Reconocida como la primera casa de champagne del mundo – fundada en 1729 – y como un símbolo francés del art de vivre, Maison Ruinart ha honrado el arte del savoir-faire, mismo que ha transmitido de generación en generación, apoyando la artesanía local y mostrando el talento artístico sin dejar de lado la innovación continua.
Tal como lo señaló el maestro bodeguero de Ruinart, Frédéric Panaïotis, el reconocimiento como el mejor champagne del mundo es un homenaje al espíritu visionario de todas las personas que conforman la Maison, desde los viñedos a las bodegas, y que han contribuido a su excelencia.
Dom Ruinart Blanc de Blancs 2010 es una añada excepcional debida en parte al clima, ya que ese año se caracterizó por un invierno muy frío, un verano templado y un agosto lluvioso, pero, sobre todo, por un proceso de crianza que aporta más complejidad y profundidad.
Para la etiqueta Dom Ruinart, la Maison solo selecciona chardonnay de terrois excepcionales (en su mayoría grand cru) y para el de esta añada en especial el equipo decidió empujar más el envejecimiento del vino, para desbloquear más capas, decisión que en gran parte le valió su actual título al mejor champagne del mundo.
El comité del Campeonato Mundial de Champagne & Vino Espumoso reconoce la intuición de los enólogos de Ruinart, para reintroducir el método tirage-liège (envejecimiento en botella bajo corcho natural) para la cuvée de prestigio de la Maison para la cosecha 2010.
Durante dicha maduración de 10 años, el corcho aporta un lado amaderado único a esta añada, un regreso a las raíces que eleva la complejidad aromática del mejor champagne del mundo, subrayando su frescura y tensión dinámica.
Como dato extra, en 2020, Ruinart revolucionó el empaque del Dom Ruinart Blanc de Blancs con un nuevo estuche de “segunda piel” que sustituyó las cajas unitarias.
Una envoltura sustentable aterciopelada, suave al tacto como la tiza, con ligeros relieves y hendiduras de las que sobresale una marca dorada aplicada a mano, la cobertura digna del mejor champagne del mundo.
El costo de una de las botellas del mejor champagne del mundo ronda entre los $240 y $300 dólares, pero probablemente esta cifra aumente tras este galardón, para más detalles visita ruinart.com