Si alguna vez has estado en una cata de whisky es probable que te hayan animado a agregar unas gotas de agua a tu vaso para ‘abrir el paladar’. Esta es una técnica empleada durante mucho tiempo en el mundo del whisky escocés de malta única, pero la cantidad a agregar suele estar abierta a interpretación.
Eso hasta ahora, gracias a un nuevo estudio de la Universidad Estatal de Washington que revela cuánta cantidad de agua es la correcta para que la experiencia sea deliciosa.
Aunque no apoyamos que se agregue agua, o cualquier otro refresco, sí estamos de acuerdo con que disfrutes de un buen whisky como más te guste. Dicho esto, si estás interesado en saber en qué punto estás diluyendo tu whisky, los investigadores de WSU lo han limitado al 20 por ciento.
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En otras palabras, y para hacerlo más sencillo, si te sirves en un vaso de alrededor de 60 ml (o dos onzas) whisky puro de malta y quieres agregar un poco de agua, no viertas más de 12 ml, que es a lo que equivale el 20 por ciento.
Según Thomas Collins, profesor asistente de WSU y autor principal del estudio, agregar más de la cantidad antes mencionada homogeneiza el whisky y hace que todo huela y sepa igual.
Para llegar a tal conclusión, los investigadores analizaron los compuestos volátiles de 25 whiskies diferentes en muchas categorías, incluidos bourbon, centeno, escocés e irlandés, además de que un panel sensorial analizó seis muestras para averiguar cuál es la cantidad correcta de agua.
Específicamente los investigadores observaron lo que llamaron ‘headspace’ sobre el líquido donde se pueden encontrar los productos químicos volátiles. Algunos se sienten atraídos por el agua y otros son repelidos por ella, por lo que, cuando agregas agua, el olor y sabor cambiarán.
Según Collins, los whiskies de turba cambiaron de ahumados a afrutados después de agregar agua, y el bourbon de sabores avainillados y roble obtuvo un perfil más pesado. Con una proporción de whisky de 60/40 los panelistas no pudieron distinguir de un whisky a otro.
Ahora que si quieres agregarle agua solo bastan unas cuantas gotas, lo cual es suficiente para desbloquear nuevos sabores sin diluir totalmente el licor. Esto también podría alentar a usar un cubo de hielo grande en lugar de cubos pequeños, así la dilución se ralentiza y puedes terminarlo antes del 20 por ciento.