Elegante, profundo, con una gran tradición e historia, el coñac se ha convertido en un símbolo de lujo dentro de la industria de las bebidas espirituosas.
Se dice que fue el favorito de Napoleón, ha sido inmortalizado en innumerables cintas cinematográficas e incluso ahora, populares estrellas del hip-hop lo adoran. Por eso, hoy que es el Día Mundial del Coñac celebramos su vigencia, su versatilidad y su virtud, compartiéndote algunas recomendaciones de los expertos de Remy Martin para que puedas disfrutarlo como se debe.
Las mejores maneras de beber coñac
El coñac puede tomarse como aperitivo o como digestivo. Los expertos recomiendan olerlo para apreciar sus aromas, después probarlo con la punta de la lengua para preparar al paladar y finalmente, beberlo.
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Como aperitivo, el coñac se suele consumir solo, pero al añadirle una gota de agua se revelan más sus aromas afrutados, florales y especiados, lo que hace que la experiencia de degustación sea más suave.
Asimismo, se le puede acompañar con un par de hielos que al diluir la bebida irán reduciendo el porcentaje de alcohol y revelando aromas y sabores más refrescantes.
Hay quienes incluso llegan a enfriarlo (no se congela debido a la alta graduación alcohólica), y esto da una experiencia casi aterciopelada en la boca.
Para un simple trago largo como aperitivo, el coñac se puede consumir con tónica o ginger ale. Esto resalta notas de fruta fresca, incluso regaliz, en un Rémy Martin VSOP.
Así es como los lugareños de la zona de Cognac disfrutan normalmente del coñac como aperitivo.
En qué se sirve
Seguramente al escuchar coñac te venga a la mente la imagen de un un señor mayor sentado en un sillón y agitando una copa baja esférica.
Sin embargo, por su versatilidad está bebida a traspasado generaciones e incluso ha cambiado de cristalería.
Hoy las bodegas recomiendan que se tome en copa de tulipa pequeña, ya que su forma alargada y estrecha ayuda a capturar la riqueza del coñac y menos el alcohol.
Elegir el vaso adecuado afecta directamente la experiencia de degustación.
Por ejemplo el coñac con hielo se sirve en un vaso grande, con espacio para dos cubitos, lo que permite sostenerlo en la mano y ayuda al proceso de derretimiento de estos, favoreciendo al olfato.
Por su parte, la copa de coñac se sugiere para un momento de degustación tradicional, después de la cena, como digestivo, donde se sirve solo y se sostiene en la mano calentar el coñac.
Cócteles con coñac
Finalmente, pero no menos delicioso e importante está la posibilidad de disfrutar del coñac en cócteles.
El rico perfil aromático de esta bebida, que es muy afrutado y floral, pero especiado, permite jugar con una variedad de opciones.
Puede sustituir fácilmente a otros ingredientes base en cócteles clásicos como el Manhattan , el Tom Collins , un Mint Julep o incluso un Mojito .
Los cócteles como Sidecar , Sazerac (cócteles secos) se disfrutan mejor después de la cena.
Un Old Fashioned con XO es rico y lleno de sabor, y puede ser un maridaje perfecto con un postre.
Incluso se pueden hacer infusiones, como con jengibre, vainilla o jazmín, para una experiencia de mixología más extensa.
Para cambiar las cosas, el Hot Toddy, un cóctel tibio con coñac, jarabe simple, limón y canela, con agua caliente, es el acompañamiento perfecto en una fría tarde de invierno.
Como se puede ver, la mejor manera de beber esta delicia es la que tú prefieras. Así que hoy, que es el del Día Mundial del coñac date la oportunidad de disfrutar.