Clase Azul México captura las historias de Eduardo Sarabia en su nueva edición especial

Los artistas siempre tienen una historia que contar, una que relata su pasado, vivencias, las historias que oían de niños, el entorno que los vio crecer, Eduardo Sarabia es uno de esos artistas que en cada obra nos narra algo y su colaboración con Clase Azul México no está exenta.

La casa mexicana de lujo que siempre nos regala exquisitos destilados y una hospitalidad fuera de serie no ha perdido ni una sola oportunidad a lo largo del año para sorprendernos con sus decantadores y por supuesto, con el líquido que resguardan al interior.

Clase Azul Eduardo Sarabia
Fotografías: Clase Azul México

Como si se tratara de un regalo de navidad adelantado, este mes, específicamente el 9 de diciembre, Clase Azul México lanzó su colaboración con Eduardo Sarabia, siendo este el primer trabajo que realizan con un artista contemporáneo, por lo menos para ofrecerse de manera pública.

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Clase Azul Tequila Edición Limitada x Eduardo Sarabia

Sobre Eduardo Sarabia sin duda hay mucho que decir, su trabajo se inspira en las historias populares del norte de México, abordando temas sociales y culturales y utilizando materiales de artesanos locales como la baldosa de cerámica, textiles tejidos y vidrio para sus creaciones.

Clase Azul Eduardo Sarabia
Fotografías: Clase Azul México

Esta vez el lienzo era bastante claro: los magníficos decantadores de Clase Azul México, que por sí solos son una obra de arte. La adhesión de Sarabia al proyecto les dio una nueva vista indescriptible.

Cada botella lleva el estilo lúdico y narrativo de Eduardo, incluyendo personajes folclóricos y motivos que cuentan parte de su historia.

Sobre esto, Eduardo nos habló de su inspiración y el proceso que conllevó el diseñar los motivos que irían inmersos en las licoreras.

“Se pueden ver picos y palos, así como la cara de una monera que habla de las historias que mi abuelo me contaba cuando era niño, era sobre la búsqueda de un tesoro, de ahí que las agregara y también incluyera el año de mi nacimiento”, nos contó el artista.

“Mi familia es del norte, de Sinaloa, así que también agregué algunos elementos que se escuchan en las canciones populares, como el perico, un gallo, la chiva”, amplió.

Clase Azul Eduardo Sarabia

Hay dos variaciones en la licorera, la primera llamada ‘Dorado’, con elementos que resaltan el oro de 24 quilates y la segunda ‘Color’, que recrea animales en verde y rojo, también con oro de 24 quilates que hacen un contraste interesante con el color azul cobalto que ya es un sello de la marca.

Sobre su trabajo con Clase Azul México, la forma en la que cerraron esta colaboración y los valores que comparten, Sarabia lo describió como una ‘conexión espiritual’, en donde la libertad que le dieron para echar a volar su creatividad le permitió que empatara muchas de sus historias y las pudiera contar a través de estas licoreras.

“Algo que también me gustó de trabajar con Clase Azul es que ellos me preguntaron cómo quería presentar el proyecto. Les dije que quería hacer una mini película enseñando el proceso creativo, me apoyaron al 100 y justo este tipo de cosas sobre crear alrededor del proyecto me emocionan aún más.”

Pero su aportación a esta edición especial no quedó exclusivamente en diseñar el exterior, la visión e historias de Eduardo también están al interior de la botella, en el líquido que resguarda y que tiene características poco vistas antes en un tequila, haciéndolo aún más único.

Clase Azul Eduardo Sarabia
Fotografías: Clase Azul México

“Desde que era niño era muy bueno dibujando, tenía una maestra que le decía a mis padres que me metieran a clases de arte y ellos al ser migrantes y no hablar inglés se sentían intimidados, sin embargo, mi maestra les dijo que ella iría por mí y me llevaría a las clases.”

“Fue así como comencé a desarrollar este talento, era algo que me gustaba y que fue bastante positivo porque me sacó de las calles. Así me gané una beca para estudiar en la Unión Soviética.”

“Todo esto lo platiqué con Viridiana Tinoco, la Maestra Destiladora, quien justo me comentó que acababan de traer una barrica de roble ruso y para mí tenía todo el sentido del mundo el usarlas, hizo que el proyecto se sintiera mucho más especial.”, explicó Sarabia.

El tequila joven de esta edición limitada es una creación de Viridiana Tinoco en la que se mezcló tequila sin añejar, un añejo madurado en barricas de roble ruso y otro tequila añejo madurado en barricas de jerez amontillado.

Finalmente, platicamos sobre el sentir del artista al tener 450 licoreras en distintas partes del mundo, la emoción que esto representa, cuando sus obras han sido expuestas tanto en México, como en Estados Unidos y Japón.

“Me emociona muchísimo porque al final es algo inesperado, conozco bien el mundo de arte, exponer en un museo, pero sí, llegar a un lugar inesperado y poder ver la licorera, llegar a diferentes públicos, que la gente haga conexiones con ella es algo emocionante y único.”