Fue en 2012 el año en que pudimos admirar por primera vez el reloj X-TREM-1. Una pieza singular y que combinaba un tourbillon volante inclinado con un sistema de visualización de las horas y los minutos retrógrados basado en campos magnéticos. Ahora su estática ha evolucionado y llega X-TREM-1 Sting HD.
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El modelo X-TREM-1 irrumpió dentro del mendo de la Alta Relojería porque al equipo de Christophe Claret se le ocurrió introducir un campo magnético dentro del reloj. Para ello, los expertos relojeros crearon un sistema en el que dos pequeñas esferas de acero se controlan a través de los campos magnéticos de precisión que generan dos imanes en miniatura movidos por hilos.
Esta nueva propuesta -de la que sólo se han creado ocho piezas- cuenta con una caja de titanio con tratamiento de PVD negro, una calavera en la caja del tourbillon y una correa de piel de pastinaca o personalizada. Como una especie de guiño adicional, si se respira sobre el cristal de zafiro del reloj, pronto se descubre una calavera.
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Se trata de un modelo pensado en los ‘bad boys’, esos rebeldes natos que si bien tienen alma rockera, también saben de excelencia mecánica, técnica y vanguardia. Y esta naturaleza salvaje se ve reflejada en los pequeños detalles del reloj.