Cuando la maestría y la inspiración son compañeras de viaje, poco importa su procedencia, pues el foco lo arrebata el resultado de su trayecto. Sucede siempre con las ediciones High Artistry de Montblanc, en las que los artesanos de la casa subliman sus capacidades para dar forma a instrumentos de escritura que trascienden la categoría de objeto para convertirse en obras de arte funcionales.
La ecuación de esta línea involucra siempre técnicas ancestrales, herramientas precisas hasta la obsesión y, por supuesto, la ejecución impecable de los artesanos de Montblanc, quienes recurren a referencias de distintos ámbitos para insertarlas en las plumas de High Artistry.
Montblanc se inspira en el mítico Orient Express
Lo nuevo de la colección High Artistry de Montblanc está inspirado en el mítico Orient Express. Atravesando una ruta que unía los territorios de Europa y Asia, el Expreso de Oriente se constituyó, más que en una vía de transporte y comunicación, en un ícono cultural y en el símbolo de una época donde los traslados tenían una parte de magia y la emoción de la incertidumbre.
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A esa esencia, de por sí enigmática, se añadió una cuota mayor de misterio a través de la novela de Agatha Christie que inmortalizó esta leyenda: Asesinato en el Expreso de Oriente, protagonizada por el detective Hercules Poirot (otro símbolo por sí mismo, dentro de la literatura de misterio, especialmente).
Al libro de la escritora inglesa se suman también obras de Alfred Hitchcock, Graham Green e Ian Fleming que fueron inspiradas por el Orient Express, para certificar su categoría como ícono cultural.
Para dar forma a las distintas versiones que conforman esta edición, Montblanc tomó en cuenta la esencia del tren, que desde su estreno, a finales del siglo XIX, mostró su identidad: un medio de transporte para los amantes del lujo, con el glamour y la suntuosidad grabados en su ADN.
Los ornamentos del mobiliario, la alta cocina que se servía a bordo, y la comodidad innegociable lo convirtieron, más que en un tren, en un hotel sobre rieles.
Montblanc tradujo con materiales preciosos esa esencia del Orient Express en una obra limitada a 83 piezas, un guiño a 1883, año en que el tren hizo su primer viaje, el 4 de octubre.
En laca negra estructurada toma forma la maquinaria de una locomotora de vapor, en el capuchón y el cuerpo de la pluma. Las referencias al Orient Express incluyen la leyenda “Vitesse limite 140 km/h”, su velocidad máxima, y el clip oculto que remite a la ventana oval del tren.
La colección se completa con otras seis ediciones, todas ellas limitadas, con materiales como oro sólido Au 750, diamantes, rubíes y zafiros, y recubiertas de detalles que remiten a la estética y la historia del mítico tren.
Maestría, refinamiento y simbolismo en altas dosis viajan juntas en el vagón de la imaginación de la firma del pico nevado.