La ciencias como es el caso de la química, la medicina, las matemáticas, la biología molecular o la física se habían apoderado de la nanotecnología y han hecho, en sus campos, grandes avances. Ahora le toca al mundo de la relojería de la mano de Greubel Forsey adentrarse también a este terreno.
Se trata del movimiento nanomecánico. El equipo Experimental Watch Technology de la casa suiza ha trabajado durante diez años para desarrollar dos prototipos de miniaturización mecánica relojera. El primero se logró en 2014 y el segundo se completó a finales de 2016. De esta manera, un nuevo universo se abre para los cronógrafos.
Primer Prototipo
En esta ocasión, los expertos de Greubel Forsey han logrado -a través de la tecnología Mechanical Nano- emplear un número reducido de piezas en muy poco espacio y con un consumo de energía prácticamente nulo.
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“Gracias al nuevo enfoque Mechanical Nano, hemos redefinido por completo el calibre y reducido su volumen y energía en una medida comparable a la reducción conseguida por los relojeros que, hace dos siglos, comprimieron los movimientos del reloj de pared para su uso en relojes de pulsera”, señaló la compañía suiza.
Segundo Prototipo
Gracias a este avance, la firma suiza ha logrado demostrar que se puede impulsar un mecanismo relojero utilizando la energía que transmite una simple corriente de aire al interior de un movimiento y por lo tanto, añadir nuevas complicaciones como es el caso del Indicateur de Fréquence.
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Hasta el momento, todos son prototipos, pero Greubel Forsey se ha comprometido a que entre 2017 y 2018 difundirá sus investigaciones mediante la presentación oficial de sus dos primeros prototipos. En la actualidad, la compañía está trabajando arduamente por la construcción del primer guardatiempo Mechanical Nano.