El trigo ha sido símbolo de renacimiento y progreso a lo largo de la historia. Para Coco Chanel este conjunto de cereales siempre fue una importante insignia que la Maison retoma para convertir en el centro de su nueva colección de alta joyería: Les Blés de Chanel.
Esta línea compuesta por 62 piezas de alta joyería incluye anillos, collares, pulseras, brazaletes, aretes y relojes fabricados en oro blanco y amarillo con incrustaciones de diamantes y gemas en varios colores. El trabajo artesanal en cada una de las joyas es extraordinario.
Para acompañar la presentación de la colección, la casa de moda patrocinó una instalación afuera del Place Vendôme, –ubicado justo enfrente de su flagship store de joyería en París– durante la semana de Alta Costura de la capital francesa. A cargo del artista Gad Weil, esta obra efímera requirió la misma dedicación y atención al detalles que los joyeros pusieron para la manufactura de Les Blés de Chanel. Utilizaron un millón de espigas de trigo, 120 metros cúbicos de arena, un kilómetro de madera para la base, y más de 500 personas involucradas en el montaje, desde granjeros hasta estudiantes de arte, durante seis meses de preparación.