El maharajá de Patiala, seguido por su séquito de asistentes que cargaban cajas con gemas, desfilo por la plaza Vendôme, del Ritz París a la boutique de Boucheron. Ese día de 1928, la casa joyera parisina recibió lo que hasta entonces había sido su encargo más extravagante: 149 joyas que se elaborarían con las gemas del gobernante indio, que incluían 7,5761 diamantes (566 quilates) y 1,432 esmeraldas (7,800 quilates). Un collar extraordinario figuraría entre las piezas de esta histórica solicitud, el mismo que con su diseño elaborado y sus detalles complejos hoy vive en el collar Jodhpur que Boucheron acaba de presentar.

Esta impresionante pieza (el precio es bajo pedido) incorpora una estructura delgada y ligera de mármol blanco de Makrana, que también se usó en 1631 para construir el Taj Mahal. El collar de gemas tiene un dije de 6 quilates en forma de cometa y, como es tradicional en la joyería india Kundan y Meenakari, el reverso del collar es igual de hermoso que el frente. La parte trasera presenta un motivo floral simétrico, hecho con zafiros y diamantes, que se inspiró en las pequeñas estructuras azules y blancas de la ciudad india de Jodhpur.

El collar Jodhpur es una obra magistral entre las más de 100 piezas que conforman la nueva colección Bleu de Jodhpur. Dicha colección, diseñada por la directora creativa Claire Choisne, rememora creaciones del pasado de la marca. “Al revisar nuestros archivos, descubrí muchas referencias a la estética india”, comenta Choisne, y agrega que el fundador de la compañía, el joyero Frédéric Boucheron, también fue fuente de inspiración. “Sus atrevidos diseños me brindaron la posibilidad de ser audaz y utilizar materiales inesperados como el mármol”.

Los artesanos de Boucheron pasaron más de 750 horas creando el collar Nagaur de la colección Bleu de Jodhpur con oro blanco de 18 quilates y perlas. Su enorme dije de cristal lleno de diamantes tiene en su interior arena del desierto de Thar, al noroeste de India. En las piezas que pueden usarse más, como las de la colección de la serie Plume de Paon, triunfa el estilo de Choisne. La directora creativa recreó el delicado plumaje del pavo real con tiras delgadas de mármol blanco y diamantes, y logró una yuxtaposición impresionante de piedra dura y gemas para crear piezas ligeras que descansan con gracia en el cuello o la muñeca de la mujer. La serie Mehndi, también etérea y ligera, representa la tradición india de los adornos de henna a través de elegantes piezas de diamantes que parece que flotan en la piel sin estar engarzados a ningún metal visible. Estas y otras piezas destacadas, entre las que se encuentra un broche con una esmeralda que alguna vez adornó la hebilla del cinturón del maharajá, sin duda son dignas de la realeza.

Video Recomendado

Por: Jill Newman

Si quieres suscribirte a nuestra versión online, da click aquí.

(boucheron.com)