En 1846 Ulysse Nardin, aprendiz de William Dubois, fundó la empresa que en la actualidad lleva su nombre. Relojes de alta calidad, personalizados por la firma de cada artesano, las primeras piezas de la marca fueron vendidas en Sudamérica y Centroamérica. Casi 20 años más tarde y con fama creciente, Ulysse Nardin logró posicionarse como fabricante líder de cronómentos de bolsillo en todo el mundo.
Dos siglos después y con más de 90 reconocimientos que homenajean su desempeño en la industria, la marca suiza exterioriza su innegable vinculación tradicional con la náutica, astronomía y vanguardia en sus especiales diseños. Ejemplo de ello es el reloj Executive Lady que, a pesar de ser un modelo basado en la versión masculina Ulysse Nardin Executive Dual Time, declara la feminidad en su máxima expresión.
Un guardatiempos único, de edición limitada y numerada, con diferentes versiones, celebra la fuerza de la mujer. Tiene un diámetro de 40 milímetros, caja de cerámica o acero inoxidable pulido, esfera de madre perla de colores, número romanos – 3, 6, 9 y 12 de diamantes-, bisel de oro o plata, movimiento automático calibre 11 1/2″ UN-24, 34 joyas, correa de piel de caimán o caucho con una amplia gama de tonos y broche plegable.
Posee 42 horas de reserva de macha, resistencia al agua de 50 metros, ventana de fecha, ajuste de zona horaria, tapa transparente, cristal de zafiro y cronógrafo.
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Ahora es conocido como otro clásico para mujeres. Se encuentra disponible en sus diferentes versiones a partir de los cinco mil euros, dependiendo los materiales del reloj.