La reciente aparición de Brad Pitt en el Festival de Venecia marcó un momento destacado en la industria del cine. Presentando su nueva película, dirigida por Jon Watts, Pitt capturó una vez más la atención de todos. Y es que, a cada una de sus presentaciones suele sumar, además, una muestra cabal de su estilo. Esta vez, no fue su traje si no su exquisito reloj Patek Philippe lo que capturó la atención.
En efect, el Patek Philippe Calatrava Réf. 2526 es una pieza es más que un simple accesorio; es un símbolo de elegancia y sofisticación que refleja la pasión de Pitt por la relojería.
Este modelo, que data de finales de la década de 1950, se caracteriza por su diseño clásico en oro amarillo, con una esfera color crema y un segundero pequeño a las 6 horas. Su correa Gay Frères, también en oro de 18 quilates, añade un toque de lujo que complementa a la perfección su impecable look.
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Patek Philippe Calatrava: valor que trasciende el tiempo
El Patek Philippe Calatrava es considerado uno de los relojes más buscados por los coleccionistas, y su rareza lo hace aún más especial. Con un valor que supera los 100 mil euros, este reloj no es fácil de encontrar en el mercado. Su movimiento automático 12-600AT y la calidad de su fabricación lo convierten en una joya de la relojería, apreciada no solo por su estética, sino también por su legado.
Según expertos en el tema, como Mikael Wallhagen de Sotheby’s, los relojes Patek Philippe, especialmente los vintage, son producidos en cantidades limitadas, lo que los convierte en verdaderos tesoros para los coleccionistas.
Pitt, conocido por su amor por la relojería, ha cultivado una colección impresionante que incluye modelos raros y significativos. Su elección del Calatrava no es casual; representa un hito en la historia de Patek Philippe, siendo el primer reloj de la marca con movimiento automático. Esta pieza no solo es un reflejo del gusto personal de Pitt, sino también un tributo a la excelencia en la relojería.