El circuito no es el único lugar donde Carlos Sainz ha tenido que perseguir a la gente. El reloj Richard Mille del piloto de Ferrari fue robado mientras se encontraba afuera de su hotel en Milán el pasado fin de semana, según The Drive.
Afortunadamente, Sainz y miembros de su personal de apoyo pudieron atrapar a los ladrones y retenerlos hasta que la policía llegó a arrestarlos.
El robo ocurrió el domingo por la tarde, después del Gran Premio de Italia de F1 en Monza. Según los informes, Carlos Sainz, que terminó tercero en la carrera, fue abordado afuera del Hotel Armani por tres hombres haciéndose pasar por fanáticos que resultaron estar más interesados en su reloj de lujo que en su firma.
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Después de que el trío se llevó el reloj, un grupo que supuestamente incluía a Sainz, su entrenador, su asistente y algunos transeúntes los persiguieron. El grupo finalmente alcanzó a los ladrones, recuperó el reloj y los retuvo hasta que llegaron las autoridades.
El Richard Mille RM 67-02 de Carlos Sainz
Puede que perseguir a los delincuentes no haya sido la decisión más inteligente, pero es fácil ver por qué quería Carlos Sainz recuperar su Richard Mille.
El reloj en cuestión es el RM 67-02 Alexander Zevrev, una edición especial del guardatiempo deportivo ultraligero fabricado en los mismos colores que el auto de F1 de Ferrari.
ESPN informó inicialmente que el reloj valía 600,000 dólares , pero los minoristas de segunda mano como Wrist Aficionado venden regularmente el reloj por cerca de 300,000 dólares.
“Como muchos de vosotros ya sabéis, ayer vivimos un incidente desafortunado en Milán”, escribió Carlos Sainz el lunes en X, antes conocido como Twitter. “Lo más importante es que todos estamos bien y esto sólo quedará como una anécdota desagradable”.
Carlos Sainz no es el único piloto de F1 al que le han robado el reloj recientemente. En abril pasado, unos delincuentes secuestraron el RM 67-02 de su compañero de equipo en Ferrari, Charles Leclerc, mientras posaba para selfies con un grupo de fans en la ciudad turística italiana de Viareggio.
Esta primavera, Leclerc pidió a los fanáticos que dejaran de presentarse en la puerta de su casa en Mónaco y, aunque el incidente no fue citado como motivo de la solicitud, no sería sorprendente que así fuera.
Nota publicada previamente por BRYAN HOOD en Robb Report EE.UU.