Una casa muy singular, ubicada sobre un risco en Malibú, con vista hacia el mar, tendrá el fuselaje de un avión de guerra vintage como parte de su decoración. Dicha mansión de 10,300 pies cuadrados, se encuentra actualmente en construcción y se espera sea terminada para el verano del 2016.
El desarrollador y arquitecto Scott Gillen, quien se encuentra a cargo del proyecto, fue la mente que ideó usar un fuselaje de un avión verdadero (el atractivo principal de la casa) para cubrir un espacio de la gran sala.
La lujosa mansión cuenta con cinco cuartos, enorme sala, cine, gimnasio privado, cuarto de juegos, cuarto de vino y una habitación especial para puros, misma que posee sistemas de ventilación y humidificación para mantener los habanos en perfectas condiciones.
En la parte de afuera tiene una casa para huéspedes de 4 mil 700 pies cuadrados, piscina, pista de motor con stand para valet y un área calefactada para que los huéspedes esperen sus vehículos.
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La mansión será vendida completamente amueblada y por un precio estimado de 60 millones de dólares.