El 9 de noviembre de 1989 caía el muro de Berlin y se ponía fin a 28 años de división entre el bloque socialista y el bloque capitalista. No fueron pocos los berlineses que salieron de sus casas para derribar un muro que además de significar la Paz, también permitía el reencuentro de numerosas familias.
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En la actualidad, varios fragmentos del conocido ‘muro de la vergüenza’ se encuentran en puntos importantes del mundo como El Vaticano, la sede de la CIA en Washington DC, en el Rockefeller Center de Nueva York, el Santuario de Fátima en Portugal, en la sede del Parlamento de la Unión Europea y el parque Berlín en Madrid.
Ahora, la casa de subastas Morton presenta el fragmento 266 del muro de Berlín ya que su dueño, el Museo de Historia Moderna en la Ciudad de México, cierra sus puertas definitivamente.
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La subasta, que se realizará el 27 de mayo, incluirá también otros objetos de colección de la talla de radiotransmisores de los años 40, máquinas de escribir de los años 30, gramófonos y radios antiguos, matrioshkas de personajes emblemáticos del bloque socialista, entre otras piezas de gran valor histórico.