Nolinski Hotel, donde la alta costura parisina se encuentra con la modernidad millennial

París es una de esas ciudades que puedes visitar año tras año y aún así descubrir cosas que nunca antes habías experimentado. Anualmente, los visitantes pasan alrededor de 35 millones de noches en los hoteles de la ciudad, lo que convierte a la capital francesa en el centro de la hospitalidad de lujo.

Ubicado en la Avenida de la Ópera, a pocos pasos de la Rue Saint-Honoré, el Palais Royal, el Jardin de Tuileries y el Louvre, se encuentra un hotel de lujo que combina a la perfección el diseño clásico parisino con un toque claramente moderno: el Nolinski Hotel, donde se hospedó recientemente Robb Report México.

Nolinski Hotel en París

Cuando pasas por las grandes puertas de este inmueble, enmarcadas por un intrincado trabajo de metal Art Decó, te transportas instantáneamente a un mundo de gran diseño y dramatismo concebido por el renombrado diseñador francés Jean-Louis Deniot.

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Después de hacer check-in en el lobby minimalista e íntimo que cuenta con un hermoso escritorio hecho completamente de mármol verde de Carrara, nos dirigimos a nuestra habitación, pasando la espectacular gran escalera completamente cubierta de nubes pintadas a mano que simbolizan un sorprendente ascenso al cielo.

La encarnación de la nueva generación de “Alta Decoración”, Jean-Louis Deniot ha diseñado proyectos en todo el mundo en Londres, Milán, Capri, Estambul, Moscú, Nueva Delhi, Nueva York y Hong Kong. Inspirándose en la decoración clásica francesa y la ‘alta costura’, Jean-Louis Deniot también consideró los deseos y necesidades del viajero de lujo de hoy.

Cada idea, detalle y objeto da el aspecto de un apartamento de la era Haussmann a las 45 habitaciones (incluidas 9 suites). El espacio, la comodidad y el estilo son los tres elementos clave que definen cada uno de los alojamientos del hotel. Cada apartamento revela su propia combinación de colores y todos los apartamentos cuentan con hermosos materiales, lámparas de pared tenues, molduras y paneles de madera neoclásicos, ricos tapices y telas, entretejidos con un hilo de refinamiento.

Un armario lacado vigila un elegante escritorio, con recuerdos escultóricos y de cerámica de tierras lejanas, mientras que las pesadas cortinas y las lujosas alfombras brindan el toque final más indulgente a estos lofts parisinos. Realmente te sientes como si estuvieras viviendo en un lujoso apartamento francés durante toda tu estadía.

A medida que la tarde se convertía en noche, nos dirigimos al Cocktail bar, un ambiente maravillosamente privado y discreto escondido detrás de pesadas cortinas de tweed que mantienen a raya el bullicio de París.

Mientras nos sentábamos en las cómodas sillas giratorias bajo un techo de pan de plata, disfrutamos de cócteles personalizados entre los parisinos locales y los huéspedes del Nolinski Hotel con los sonidos sensuales creados por el pianista, antes de salir a cenar en uno de los muchos restaurantes japoneses del barrio, conocido como ” Pequeño Tokio”.

Por la mañana, los huéspedes disfrutan del desayuno en el restaurante Le Nolinski (que también sirve almuerzo y cena). La espectacular decoración del restaurante mezcla sutilmente el Art Déco con el espíritu de los años 70 con un esquema de color con amarillos y dorados. Madera de pinotea color miel, un “burst” Art Decó adornado con pan de oro, mármol amarillo de Siena, bancas tapizadas en pana dorada, sillas de mimbre, luminarias de latón y luz dorada, todo se combina a la perfección.

Para los huéspedes enfocados en la salud y el bienestar, la opción Nolinski Healthy es perfecta. Las bayas más frescas con un suntuoso yogur, un omelette de clara de huevo hecha a la perfección parisina, una tostada de aguacate junto con una taza de café caliente es la manera perfecta de comenzar el día.

Si deseas continuar con tu viaje de bienestar, hay que dirigirse al spa subterráneo del hotel, Spa Nolinski by La Colline, donde sus huéspedes pueden sentarse en los sofás que bordean la piscina, nadar en la espectacular piscina con techo de espejo y flanqueado por una pantalla LED gigante, relajarse en el sauna y el hammam, o disfrutar de un tratamiento de spa en la hermosa sala bajo el brillo de cientos de luces parpadeantes.

París eliminó recientemente todos los requisitos de prueba de COVID para ingresar al país y los viajeros solo necesitan presentar su tarjeta de vacunas para ingresar. La primavera ha llegado y es el momento perfecto para visitar la ciudad.

Las tarifas en Nolinski están disponibles a partir de 620 euros y pueden ser reservadas en su página oficial.