La península ibérica, específicamente España y Portugal, es reconocida por la calidad de su gastronomía. La cocina española no puede faltar en los resorts más exclusivos del mundo, mientras que el vino y la comida portuguesa han ido en ascenso los últimos años. Por eso, te presentamos 10 lugares que no puedes dejar de visitar en tu próxima visita a esta región, todos ellos merecedores de estrellas Michelin.
El Celler de Can Roca (Girona, España)
Un negocio completamente familiar, el Celler de Can Roca está dirigido por los tres hermanos Roca: Joan es el chef, Josep el sommelier y Jordi el repostero. Este restaurante catalán es ícono de la gastronomía española.
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Fundado en 1986, uno de sus platillos insignia es el parmentier de langosta, servido con trompetas de la muerte, mismo que preparan desde 1988. La cava es uno de los atractivos más importantes del local, encabezada por Josep Roca, cuenta con más de 40 mil vinos españoles e internacionales.
Mugaritz (Guipúzcoa, España)
Mugaritz ofrece una experiencia gastronómica de máximo 24 tiempos, esto varía conforme la temporada del año y los ciclos naturales de los productos que se usan. La experiencia de tres horas es una travesía culinaria que involucra los cinco sentidos. Un ejemplo de este viaje es la pieza de ternera asada y perfumada entre brasas de sarmiento, briznas de tomillo y tintes naturales, cenizas, sales, y rábanos crocantes.
El chef Andoni Aduriz es considerado el heredero natural del imperio culinario de Ferran Adriá, quien es reconocido como el chef más creativo de la historia, razón por la cual él es el indicado para dirigir esta aventura gastronómica que pretende Mugaritz.
Asador Etxebarri (Atxondo, España)
A una hora de San Sebastián, Asador Etxebarri está en un villa medieval y, tan sólo el viaje, es una experiencia. El restaurante lo dirige Víctor Arguinzoniz, un autodidacta en la cocina.
Los ingredientes son tan frescos, que se cultivan en el patio trasero del inmueble. Arguinzoniz produce queso fresco mozzarella de búfalo todas las mañanas, que puede ser acompañado con una tártara de chorizo casero o camarones de Palamós con mantequilla de cabra.
Largo do Paço (Braga, Portugal)
Ubicado dentro del exclusivo hotel Casa da Calçada, cuenta con una estrella Michelin y se caracteriza por reinterpretar platillos tradicionales de la cocina portuguesa.
Los comensales pueden elegir una degustación de ocho u 11 tiempos, planeada por el chef André Silva, nombrado Chef Portugués del Año en 2013. Pulpo con patatas dulces, risotto de alcachofa o magret de pato con ensalada de apio, son algunas de las reinvenciones de Silva.
Azurmendi (Viscaya, España)
La experiencia en el Azurmendi comienza cuando los clientes suben a la terraza para un reconocimiento del huerto de la casa. El cocinero Eneko Atxa es conocido por darle a su cocina un toque hogareño. Son famosos sus huevos trufados y las setas al ajillo.
Además, ganó el premio The Sustainable Restaurant Award 2014. Es un recinto responsable con el medio ambiente, pues no solo cultiva ingredientes propios; sino que reutiliza los desechos y cuenta con un sistema de calefacción que trabaja con energía geotérmica.
Belcanto (Lisboa, Portugal)
Encabezado por el chef José Avillez, una de las promesas de la cocina europea, Belcanto es un recinto de la capital portuguesa que encanta a los comensales. Cabe mencionar que es el único restaurante del país con dos estrellas Michelin.
El lugar de caracteriza por la atención estética que se le da a cada platillo. El platillo conocido como Pintura de Jackson Pollock, es un filete de pescado usado como lienzo para recrear un fresco del pintor. El Martini invertido es una bebida servida en un vaso de aceituna comestible.
QuiQue Dacosta (Alicante, España)
El lugar lleva el nombre de su chef, quien compró un restaurante familiar llamado El Poblet y lo convirtió en una cocina minimalista que ha cambiado la percepción de Costa Blanca.
El menú se divide en universo local, que incluye platos tradicionales, parte del bagaje culinario español; y fronteras, en el que se dan a conocer las innovaciones, la visión gastronómica y la pasión por la creatividad. El maridaje que ofrece el restaurante es una de sus grandes cualidades.
Bon Bon (Carvoeiro, Portugal)
Bon Bon prepara cocina mediterránea fusionada con sabores portugueses tradicionales. La oferta cambia conforme las estaciones y lo más sensato es atender la recomendación diaria del chef, Rui Silvestre, un chef que cree en la magia de las recetas sencillas
Entre los platillos destacados está la langosta con elote dulce, yema de huevo y jengibre o los camarones morados con ensalada de algas y berros.
Sao Gabriel (Almancil, Portugal)
Sao Gabriel es un lugar de cocina creativa, enfocado a los sabores del mar, especialmente del océano Atlántico. El chef, Leonel Pereira es reconocido en Portugal como sinónimo de tradición, frescura, innovación y sabor.
Algunos de sus mejores platillos son: el risotto de langosta con espárragos de mar y soufflé de plancton; crema de camarón, sazonada con curry de Madrás; o foie gras de hígado de pato con molleja de cerdo y trompetas de la muerte.
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