Después de deslumbrar el año pasado a los asistentes del Salone del Mobile de Milán con una colección de iluminación, muebles y textiles, Hermès volvió a sorprender de nuevo. En esta ocasión con un pabellón que ha robado la mirada de todos los presentes en la feria.

Este año su colección de casa se exhibe en un pabellón diseñado por el arquitecto mexicano Mauricio Rocha, donde 17,000 ladrillos grises de concreto rodean los innovadores muebles de la firma.

Hay diez piezas de mobiliario clásicas que diseñó René Dumas y re editaron en color maple, así como dos sillas del arquitecto Rafael Moneo a las que lograron dar un nuevo sentido. Por medio de ellas logran transmitir la importancia que el trabajo, las obras y la artesanía tienen para Hermès. La línea también está integrada por sofás, sillas, charolas, cobijas y un gabinete.

La principal inspiración es el balance y la proporción. Esos dos conceptos son el centro de toda la colección y se pueden apreciar en la forma simétrica de diversas piezas.

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