Además de las construcciones románicas y las antiguas zonas céntricas de las principales ciudades de la isla de Cerdeña, en Italia, esta villa de lujo de diseño orgánico, añade un peldaño a la típica arquitectura local.
Los fundadores de Mask architects, Oznur Pınar Cer y Danilo Petta, han diseñado la residencia de lujo “villa G01” que ofrece vistas panorámicas al mar, en una de las zonas más exclusivas del norte de la isla.
La vivienda fue diseñada para garantizar la sostenibilidad de la naturaleza local tanto natural como construida, utilizando técnicas de edificación contemporáneas.
Para planificar esta villa de lujo de 592 m2, que ya se encuentra en construcción, los arquitectos de Mask combinaron la inspiración que extrajeron de la arquitectura y los materiales regionales, añadiendo su propio estilo.
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Una villa de lujo única en su tipo
Enclavada entre rocas y vegetación, y bordeando la playa con sus aguas cristalinas, el proyecto se integra con el entorno natural de manera armoniosa.
La superficie habitable consta de un gran salón que se conecta a la piscina exterior y al paisaje exterior a través de ventanas abatibles.
Grandes aberturas en toda la residencia permiten que la luz penetre en el interior, generando un ambiente luminoso.
El diseño de la villa de lujo se centra alrededor de una pared curva ubicada en la sala de estar, con la estructura del cuerpo principal desarrollándose a su alrededor.
Se caracteriza por sus texturas elegantes, decoración interior refinada y acabados tradicionales de primera categoría.
Los arquitectos han utilizado formas y volúmenes curvos para lograr una distribución y división perfecta del espacio interior y exterior, de acuerdo con el paisaje.
Una casa con espacios y líneas reveladoras
La carcasa exterior distintiva se materializa con el uso de un acabado tradicional, que recuerda a una “casa de piedra”.
Una formación en forma de cueva en el techo está inspirada en rocas locales que muestran vacíos debido a la corrosión y los efectos de los fenómenos naturales.
A través del vacío en éstas cuevas, los usuarios pueden acceder a la terraza que funge como sala de estar.
Al estar en el techo, el vacío también brinda a los ocupantes la oportunidad de caminar sobre el mismo y disfrutar de la vista panorámica día y noche.
Así es que la atmósfera del bosque abraza suavemente la casa garantizando una sensación de tranquilidad, sensación que se extiende sobre un jardín al aire libre.
Diseñado como un bosque con piedras naturales y plantas locales, su diseño abraza la estructura, fusionándola de forma orgánica.
La vivienda consta de cuatro dormitorios y una serie de zonas de estar, que se pueden disfrutar con familiares y amigos.
Las ventanas de los dormitorios ofrecen vistas ampliadas hacia el mar y la vegetación circundante, ya que todos estos sectores disfrutan de suficiente luz natural.
Uno de los espacios restantes de la villa, es un spa con un acogedor sauna y lugar para masajes.
Finalmente, una gran alberca proporciona continuidad y transición entre el interior y el exterior con muros cortina plegables.
Así es que el usuario puede abrir para dar una sensación de máxima apertura en la sala de estar, donde la piscina infinita se alinea con el mar.
Por su parte, el espejo de agua está rodeado de diversas actividades al aire libre como una cocina y una gran mesa de comedor, además de un cine al aire libre, solarium y área de usos múltiples.