Ubicado majestuosamente en la cima de un acantilado con vista a las aguas turquesas del Golfo de Omán se encuentra el Shangri-La Al Husn Resort, en la ciudad de Muscat, la capital de Omán, y en él, el Hareer Spa de L’Occitane, una joya para los amantes de las experiencias de lujo.
Para ir tomando perspectiva de las maravillosas amenidades del Hareer Spa de L’Occitane, hay que dar un pequeño contexto del Shangri-La Al Husn Resort, que ofrece playa privada y aislada, junto a una piscina infinita, ideal para los más románticos.
Respecto del Hareer Spa de L’Occitane que ostenta el resort, está inspirado en el arte mediterráneo de vivir bien y es el primer y único L’Occitane Spa en el Sultanato de Omán.
Ofrece una fusión de auténticas terapias francesas con ingredientes locales de los más naturales, con rituales de spa inspirados en la textura y el brillo de la seda que da nombre a la locación.
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Vale mencionar que los L’Occitane Spa se encuentran en once países alrededor del mundo, siendo Omán una de los más recientes de la lista que incluye instalaciones en Hong Kong, China, Taiwán, Japón, Francia, España y hasta Brasil.
Asimismo, todos los espacios de la marca poseen un menú de appetizers y comida diseñado por el chef de una estrella Michelin, Jerome Roy.
Hareer Spa de L’Occitane, lujo francés en Oriente
Todos ofrecen la mejor experiencia de marca en un entorno lujoso, con cinco cabinas de tratamiento o más, un área de relajación dedicada e hidroterapias.
Al llegar los huéspedes al Hareer Spa, son recibidos con su exclusivo té helado de lavanda o bien, después del tratamiento, se les ofrece té verde tradicional para que ratifiquen la experiencia.
En este Hareer Spa de L’Occitane todo se conjuga para disfrutar del bienestar de Provence y brindar un momento único, incluso a través de las sugerencias de los expertos sobre qué tratamiento será óptimo para cada huésped.
Para consentirse seriamente, se recomienda probar la exclusiva rutina del Omani Honey Heaven, una mixtura única de bondad francesa y árabe.
Incluye una máscara exfoliante, elaborada con sal marina de Omán, gránulos de azúcar y polen de flores francesas, mezclado una hora antes de la cita y completamente orgánico; de hecho, es tan natural que -de acuerdo a recomendaciones del lugar-, literalmente es lo suficientemente bueno como para paladearlo.
Después de una exfoliación suave de 30 minutos de la cabeza a los pies, sigue una hora de masaje relajante que combina varias técnicas, entre ellas, ligeros movimientos suecos, acupresión china y estiramientos balineses.
Del Hareer Spa de L’Occitane no solo logrará salir con la piel suave como un bebé, sino que también será una sesión de relajación completa para el resto de los sentidos.
Con la magia que ofrecen las vistas del lugar y una construcción digna de las mil y una noches, el Hareer Spa de L’Occitane alivia eficazmente las tensiones eliminando hasta el último ápice de estrés del organismo.
Amenidades de sultán
Sobre el hotel, vale decir que cada habitación cuenta con un kit de amenidades proporcionado por la marca francesa junto a la exquisita decoración floral que la caracteriza.
El Shangri-La Al Husn Resort & Spa mantiene una política de alentar solo visitas de huéspedes mayores a 16 años que pueden disfrutar de una variedad de comodidades y experiencias de lujo, como la playa privada de 100 metros de frente.
Una piscina infinita y amenidades dignas de un sultán, es la espectacularidad que comparte con su propiedad hermana, el Shangri-La Barr Al Jussah Resort & Spa.
El complejo de 180 habitaciones ofrece algunas de las suites más grandes de Muscat, con una hermosa decoración inspirada en los palacios árabes con arte omaní, además de baños revestidos de mármol y blancos de satén y el más fino algodón.
Es prácticamente la versión moderna de un palacio del medio oriente, de aquellos de las películas, visitados por propietarios de yates aventureros y expatriados del otro lado del Golfo, que acudían por un relax al estilo del sultán.
Para los amantes de la naturaleza, la piscina de borde infinito, rodeada de palmeras datileras, da marco a una playa privada ubicada entre escarpados acantilados de piedra caliza, santuario de tortugas marinas.
Y si quiere llegar hasta el sultanato en superyate, a solo 800 metros del complejo Al Husn se encuentra el puerto deportivo Al Mina, donde se inaugurará un club náutico exclusivo para miembros a finales de este año.
Los interesados por reservar su estadía en el complejo, pueden hacerlo online a través de su página web.