Una de las ciudades más emblemáticas del mundo, París, ha dado cátedra en cuanto al mundo del entretenimiento se refiere al transformar el río Sena en un cine flotante, en donde el distanciamiento social y la diversión fue lo más importante.
Desde hace algunos meses París ha podido retomar de manera paulatina el ritmo normal de vida de sus habitantes; sin embargo, la industria cinematográfica y más especialmente la de los cines, se ha tenido que mantener cerrada debido a los riesgos que conlleva, y para celebrar su reapertura los parisinos buscaron una manera muy original.
Cinema sur l’eau
Con 38 barcos eléctricos a lo largo del río Sena, cerca de 150 personas pudieron disfrutar del Cinema sur l’eau (Cine sobre el agua), un evento sin precedentes que ha llamado la atención de todo el mundo.
Los responsables detrás de esta innovadora idea fueron una de las cadenas de cine más importantes de la capital francesa, Cines M2 y la marca de helados Häagen-Dazs, quienes lanzaron un concurso para rifar los lugares dentro de las pequeñas lanchas rojas, en donde los asistentes pudieron disfrutar de la película de comedia “Le Grand Bain”, cuya temática combinaba a la perfección con el evento al tratarse de la historia de un grupo de hombres que son parte de un equipo de nado sincronizado, por lo que no nos queda duda de que seguramente más de uno se quedó con las ganas de darse un ‘chapuzón’.
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Como era de esperarse, en cada una de las lanchas únicamente podían estar abordo familiares y amigos, con un máximo de 6 personas por lancha, evitando así el riesgo de propagación del virus.
¿Una nueva era?
¿Quién no extraña una tarde de estrenos en el cine, con palomitas y nachos incluidos? Los cines de diferentes ciudades lo saben, y es por eso que han tenido que recurrir a otras alternativas para seguir presentes.
En Dubai, hace unos meses cientos de automóviles de lujo hacían fila para entrar a un autocine improvisado en uno de los centros comerciales más importantes de la ciudad, y aquí en México el Autódromo Hermanos Rodriguez también ha dispuesto sus instalaciones para que los mexicanos podamos disfrutar nuevamente de lo que más disfrutamos: ver una buena película.
¿Será este el inicio de una nueva era en la industria de los cines? Solo nos queda esperar para saberlo.