Una de las leyes de la industria del estilismo es que siempre existirán esas prendas que nunca pasarán de moda, conocidas como atemporales y que solo pueden quitarse la etiqueta de “básicos” al ser reinterpretados por las altas casas de moda. Esto es lo que precisamente Valentino hizo en su más reciente colección con la icónica corbata negra.
Pierpaolo Piccioli, director creativo de la Mason italiana, ha vuelto a robar todas las miradas con una colección otoño-invierno que redefine uno de los elementos más emblemáticos de los códigos masculinos y al mismo tiempo lo transforma en un símbolo del empoderamiento femenino.
El desfile titulado Valentino Black Tie, presentado durante la Semana de la Moda de París, como su nombre indica tiene la corbata negra como pieza central e hilo conductor de los 73 looks que componen la colección y de alguna forma nos regresa a la sastrería clásica pero con un toque deconstructurado, vanguardista y sofisticado de la firma.
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La visión actual de Valentino para la corbata negra
Con esta colección el diseñador Piccioli y la casa de moda italiana han logrado establecer que la corbata negra es más que solo un accesorio complementario de un atuendo y lo han colocado como la pieza principal para transmitir un estilo empoderado y contemporáneo.
Seguramente al pensar en una corbata negra lo primero que viene a tu mente es el típico traje sastre de oficinista, pues eso esta apunto de cambiar. La nueva colección de Valentino nos muestra su versatilidad al mezclarla no solo con diferentes cortes de sastrería en los que resaltan los abrigos rectos y pantalones oversize, sino también con shorts, faldas, vestidos, transparencias y diferentes prendas con brillos o pedrería, en diferentes looks para mujer y hombre.
Dentro de la colección el clásico de las camisas blancas con corbatas se une a la vanguardia de las botas de estilo militar, los mocasines con colores, las prendas con detalles en plumas o brillantes y la creciente tendencia de las faldas y shorts para hombres.
En general la colección se apoya del blanco y el negro como colores principales, pero añade toques sobresalientes al mezclar prendas en tonos rosas, azules, verdes, grises y por supuesto el icónico rojo vibrante de la Maison. Creando así una esencia sofisticada pero con un poder innovador sobresaliente.