Lazzarini acaba de diseñar el megayate más ancho del mundo, el Sovrano, y esto es todo lo que tendrá

Lazzarini, el estudio de diseño disruptivo, que ha imaginado todo, desde un megayate con forma de cisne hasta un superyate volador propulsado por dirigibles, acaba de presentar una nueva y épica embarcación con un diseño diferente a todo lo que se encuentra actualmente en el agua.

Bautizado como Sovrano, o ‘soberano’ en italiano, el barco mide unos 555 imponentes pies y es el rey de los mares cuando se trata de tamaño. De hecho, la firma asegura que se trata del yate más ancho del mundo.

Lazzarini
Fotografías: Lazzarini

Así es Sovrano, el yate más ancho del mundo

El buque está equipado con una plataforma a cada lado de la cubierta principal que da como resultado una manga de 108 pies. Las dos plataformas se pueden convertir en helipuertos, piscinas o salones adicionales, según lo desee el propietario.

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Cada plataforma también está equipada con cuatro cabestrantes eléctricos que permiten bajar una sección hasta la línea de flotación cuando sea necesario para cenar o descansar junto al mar.

Pero esta no es la única característica espectacular de Sovrano. El piso cinco luce un atrio cubierto en la proa que se abre para revelar un oasis escondido. El espacio hundido alberga un jardín verde y una piscina en el nivel inferior que los huéspedes pueden disfrutar en cualquier temporada, con dos piscinas más.

Otro punto a destacar es el garaje gigante, que puede almacenar dos ténderes de 49 pies y hasta seis superdeportivos. Se complementa con una plataforma elevadora y dos grúas en popa que pueden soportar la carga y descarga de los distintos vehículos.

Sovrano podrá alojar hasta 50 marineros en 20 suites privadas. También ofrece espacio para hasta 60 tripulantes, eso lo hace más parecido a un crucero que a un yate privado, por supuesto, las viviendas pueden personalizarse completamente según las preferencias del cliente.

En cuanto al rendimiento, Lazzarini dice que la bestia con casco de acero podría estar equipada con motores eléctricos o con un sistema de propulsión híbrido para una velocidad máxima estimada de 18 nudos o 31 nudos, respectivamente.

El estudio estima que la construcción tardará cuatro años en completarse, momento en el que probablemente habrá otro diseño loco de Lazzarini en el horizonte.