En una suite así, cualquier luna de miel será mucho más dulce. Después de casarse en los Hamptons a finales del mes pasado, la reconocida actriz, Gwyneth Paltrow, y el guionista, Brad Falchuk, decidieron tomarse un par de días para vacacionar con mucho estilo y sofisticación en el Four Season Hotel George V. Estamos seguros que, hospedándose en un lugar así, la pareja no querrá salir del cuarto ni para ver la Torre Eiffel.
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Desde que Paltrow llegó al hotel el día de ayer esta no ha podido dejar de compartir cada detalle de su habitación en redes. A través de su Instagram la artista nos ha dado recorridos de la suite en donde se logran apreciar sus pisos de mármol, enormes espacios y exquisita decoración interior.
Gwyneth Patrow no ha podido dejar de compartir detalles de su habitación en redes.
El Four Seasons es reconocido como uno de los mejores hoteles de la capital francesa. El emblemático edifico originario de 1928 cuenta con un refinado diseño arquitectónico y extraordinarias vistas de la ciudad. Entre sus numerosas amenidades se encuentran un exclusivo spa, cava de vino y tres restaurantes, cada uno con tres estrellas Michelin, en los que los huéspedes pueden gozar de extraordinarias propuestas gastronómicos elaboradas por algunos de los chefs más talentosos de Francia.
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Una de las cosas que más ama Gwyneth del hotel son sus arreglos florales. En una foto compartida por la actriz, esta posa junto a una hermosa creación y comenta: “Bonjour les fleurs! Mis instalaciones de flores favoritas siempre están en el lobby de @fsparis”.
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Los recién casados parecen haber optado por una de las suites presidenciales del hotel, las cuales cuestan casi 17 mil dólares la noche. La habitación cuenta con comedor y mesa para hasta ocho comensales, una espaciosa sala de estar, baño de vapor, sauna e incluso un gimnasio privado. En cuanto al diseño interior, este luce un lujoso estilo europeo decorado con candelabros de cristal, pinturas al óleo y diversas piezas de arte.
París es apenas el segundo destino de los novios en su luna de miel, sin embargo, con una habitación así, nadie los culparía si quisieran prolongar su estancia en Francia algunos cuantos días.