Todo lo que los Duques de Sussex hacen o deciden es noticia y, desde luego, su nueva residencia no podía ser la excepción. A partir de 2019, Meghan Markle y el Príncipe Harry ya no vivirán en el Palacio de Kensington.
Relacionada: Así es, Studios Universal ha comenzado a construir Nintendo Land
Hogar de cuento de hadas
El matrimonio real se mudará a una casa de campo perteneciente al Castillo de Windsor, misma que se está adaptando para alojar a la pareja, misma que recibirá a su primogénito durante la primavera del próximo año.
View this post on InstagramVideo Recomendado
La residencia recibe el nombre de Frogmore House y es digna de un cuento de hadas. Pertenece a los Windsor desde el XVIII, fue un regalo para la Reina Carlota y sus hijas.
Después perteneció a la Duquesa de Kent. Ha permanecido deshabitada durante algunos años, pues durante un largo tiempo sólo se utilizó para eventos. Incluso formó parte de la boda de Markle y el Duque de Sussex.
Para que los royals ocupen la finca a principios del año entrante tuvieron que hacerse algunas remodelaciones, éstas incluyen 10 nuevas habitaciones, guardería, gimnasio y cuarto de yoga.
Anteriormente se habían realizaron algunas restauraciones para los Duques de York; para ello se invirtieron 2.5 millones de de libras aproximadamente. Desde luego, la pareja del año no se quedará atrás y seguramente la inversión para vivir en Frogmore House también será significativa
Relacionada: Dolce & Gabbana nos enseña cómo arruinar el show más grande de la historia
Fuentes del diario The Sun mencionaron que la mudanza del príncipe y la exactriz se debe a la tensión que existe con la Duquesa de Cambridge -Kate Middleton-, pero son sólo rumores.
Mientras tanto, los futuros padres continuarán son sus relationship goals al mudarse al lugar donde contrajeron nupcias y sellaron su amor de película.