La serie Black Badge de Rolls-Royce ha sido creada para reflejar el lado más atrevido y seguro de la firma pero también para complacer a sus clientes que disfrutan la potencia de sus modelos como conductores, es así como nos presentan el nuevo Ghost II que también lleva el título del Rolls-Royce V12 más potente y centrado en el conductor de la historia.
Con este nuevo modelo, ya disponible para encargos, junto con la serie Ghost Extended II, la firma británica introduce nuevos diseños sutiles pero impactantes claramente en agilidad y potencia, al tiempo que mantienen la pureza y la presencia sofisticada de su ADN.
Rolls-Royce Black Badge Ghost II: el lujo en potencia y movimiento
Sutil pero impactante, esa parece ser la frase que rigió el proceso para el diseño exterior de este Black Badge, siendo la primera vez que el Black Badge Ghost recibe un tratamiento de estilo único para su parrilla inferior. La entrada de aire de freno inferior ahora presenta una nueva geometría, con dos tiras cromadas oscurecidas que corren longitudinalmente hacia los conductos de aire funcionales, rodeadas por marcos cromados negros técnicos.
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El modelo conserva el tratamiento cromado negro característico de la línea, en el que se oscurecen los sellos distintivos de Rolls-Royce, como el Spirit of Ecstasy, la parrilla Pantheon y la “insignia de honor” montada en el lateral. Cada componente oscurecido se pule a mano con precisión para lograr un acabado negro espejo.
Como toque innovador el Black Badge Ghost II, por primera vez las manijas de las puertas se completan con un acabado negro, lo que amplía aún más el efecto noir de superlujo. Pero el toque más llamativo de la silueta llega con su juego de ruedas forjadas de siete radios y pulidas parcialmente de 22 pulgadas. Diseñadas específicamente para este auto y proyectar su potencia mecánica.
Por dentro el Rolls-Royce Black Badge Ghost II mantiene la superficies oscuras y técnicas que caracterizan la serie pero de una forma mucho más discreta. La vitrina alberga un reloj analógico y una figura iluminada de Spirit of Ecstasy, presentada en cromo negro en lugar de un acabado pulido a espejo, se ubica a un lado de la pantalla mejorada ahora con el nuevo y avanzado sistema operativo SPIRIT de la marca.
Para retratar el verdadero lujo en movimiento los artesanos de la marca desarrollaron un tejido complejo pero sobrio en forma de diamante utilizando fibras de carbono y metálicas sobre una base de madera de Bolívar negra. Las hojas tejidas a partir de carbono recubierto de resina e hilo recubierto de metal se colocan a mano creando una obra de arte con efecto tridimensional.
La cereza de este pastel de lujo sobre ruedas es el formidable motor V12 biturbo de 6,75 litros presentado en una configuaración de alta potencia capaz de producir 29 CV más de potencia y 50 Nm más de par que el Ghost Series II.
Para aprovechar esta potencia adicional, se utiliza el sistema de suspensión plana Black Badge con una unidad exclusiva de amortiguador de horquilla superior sobre el conjunto de suspensión delantera generando una conducción más ágil que Rolls-Royce describe como un “viaje en alfombra mágica”.