En lo personal no soy tan fan de los cruceros pues no me llevo muy bien con el movimiento continúo de las olas de alta mar, pero amo que literalmente sean una burbuja vacacional que lo tiene todo es por eso que he encontrado lo mejor de esos dos mundos en el nuevo y recién aperturado AVA Resort Cancún.
Un oasis de cinco estrellas ubicado a tan solo 10 minutos del aeropuerto de Cancún que fusiona una arquitectura única que te hace sentir en un crucero de lujo, conceptos culinarios a cargo de chefs reconocido, amplias amenidades, servicio personalizado y muchas más comodidades que sin duda alguna son la definición del lujo all-inclusive.
Hace tan solo unos días tuve la oportunidad de ser parte de Vive Ava Resort, un evento exclusivo de apertura que contó con happenings especiales en los diferentes spots del hotel, incluyendo una fiesta con temática del Día de Muertos y Joe Jonas como DJ.
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Pero además de que mi adolescente interior fan de los Jonas Brothers cumplió un sueño protagonizado por el set list del reconocido cantante y músico estadounidense, el verdadero dream come true fue pasar unos días redefiniendo el concepto del todo incluido en este hotel en donde todo se vive en lujo y en grande.
AVA Resort Cancún
Liderado por la innovadora firma hotelera RCD Hoteles, el resort cuenta con 1600 habitaciones, todas con vista al mar, 27 restaurantes y bares dirigidos por chefs y mixólogos galardonados, un spa y centro de bienestar de clase mundial, un centro de fitness de última generación, canchas de pickleball, ring de boxeo y más, un parque acuático diseñado a medida, AVA Kids Club, The Lounge (solo para adolescentes), la única bahía de agua salada de más de 36,000 metros cuadrados en el área, además de seis piscinas.
Bajo un concepto all-inclusive AVA Resort Cancún fue diseñado por los mundialmente reconocidos Boris Pena Architects y Gensler Architects, con la visión de crear un entorno sereno, despreocupado y sofisticado, con detalles que hacen guiño a la belleza del Caribe mexicano. Desde el primer instante el hotel te hace sentir dentro de un crucero, no solo por su bellas habitaciones con vista al mar, balcones con jacuzzi privado (un highlight es usarlo por la tarde-noche para ver el atardecer desde ahí) y detalles únicos en el diseño como una “escotilla” ventana en el baño, sino por toda su distribución.
Las Villas AVA, la categoría de habitación más alta, incluyen piscinas privadas, bares completos, cocina y comedor para hasta 12 personas, así como servicios de mayordomo.
El hotel se distribuye en dos torres Norte y Sur, y sí como un auténtico mega crucero llega de un lado a otro puede ser abrumador pero eso se pasa gracias a que en el camino nunca falta un spot nuevo por descubrir como un Boliche, cafeterías, restaurantes, heladerías y más.
AVA fue construido en estrecha colaboración con artesanos locales para fabricar una amplia gama de acabados a mano, incluyendo azulejos, telas y trabajos en madera, específicamente diseñados para el complejo, la iluminación incandescente es la visión de Lasvit, el aclamado diseñador checo de vidrio a la medida, quien creó la instalación para el vestíbulo de AVA, convirtiéndolo en otro elemento del complejo que supera las expectativas del todo incluido.
Otro punto con el que el resort redefine la idea que teníamos de un todo incluido son sus conceptos culinarios, que si bien incluyen los clásicos snacks junto a la piscina y barras de bebidas, también cuenta con una oferta interesante que incluye restaurantes cinco estrellas con menús internacionales hasta mercados y taquerías.
Cada uno de los 27 restaurantes y bares del hotel ha sido diseñado individualmente para crear un espacio único, algunos de los imperdibles son Copal con un menú acargo de la reconocida chef Lula Martin del Campo –el pescado zarandeado y el pastel de tres leches de cajeta son un must–, LIVO con menú mediterráneo diseñado para compartir, Chez Moi especializado en cocina francesa y solo para adultos, Minami que en total suman 40 mesas de teppanyaki, BAO ideal para los amantes de la cocina asiática, Veranda con platillos italianos y pastas recién hechas, y Black Iron especializado en carne y grill –su entrada de coliflor es de otro planeta–.
En temas de mixología resalta el bar central The Cocktail Bar liderado por la mixologa Fátima León, quién comenta que la idea de este concpeto fue romper y elevar más la barra a la que estamos acostumbrados en un all-inclusive, esto a través de una carta que reimagina algunos clásicos como un martini espresso con helado, una piña colada sin lácteos y ahumada y un cantarito de tequila con naranja ultra refrescante.
Otra joya que vale la pena resaltar del nuevo AVA Resort Cancún es su oferta wellness, The Spa es un spa y centro de bienestar de más de 6,500 metros cuadrados de clase
Mundial, un verdadero santuario de lujo y tranquilidad con espacios de tratamiento personalizados, circuito completo de hidroterapia, así como sauna y baños de vapor. Cuenta con 28 cabinas individuales, 24 cabinas dobles, 2 cabinas VIP, 1 Golden VIP, un extenso menú de faciales y tratamientos corporales.
Finalmente, el complejo sigue una filosofía de responsabilidad social y ambiental, trabajando de la mano con artesanos locales y la comunidad, pero específicamente con la fundación RCD y su proyecto Tejedoras de Sueños, encargadas de reciclar los diferentes “deshechos” del hotel como toallas, sábanas, etc. Para que mujeres de las comunidades más vulnerables de la zona den vida a diferentes muñecos o peluches, llaveros, bolsas y tengan así una mejor calidad de vida para ellas y sus familias, incluyendo educación y salud.
Un punto más que me hizo sentirme como en un crucero de alta gama en AVA Resort Cancún es que realmente lo tiene todo para que no tengas necesidad o sientas que debes salir de él durante tu estancia, diferentes ofertas culinarias que hasta te faltarán días para que pruebes todas, un servicio personalizado y toda clase de amenidades para pasar tus días sin ninguna preocupación.