Tesla Model S fue rediseñado para ser el sedán más seguro en ciudad o carretera. Con un rendimiento sin precedentes gracias a su sistema de propulsión totalmente eléctrico, acelera de 0 a 100 km/h en tan sólo 3.0 segundos. Como parte del cambio de imagen, Tesla decidió eliminar la parrilla frontal por una completamente cerrada, esto debido a que los automóviles eléctricos no necesitan refrigeración para el motor, además de que esto beneficia mucho más la aerodinámica
El Tesla Model S posee faros de LED, que además de mejorar el estilo refuerzan la seguridad gracias a sus 14 luces que tienen tres posiciones, las cuales se ajustan a las curvas y mejoran la visibilidad en la noche, especialmente en caminos sinuosos.
Tiene un sistema de filtración de aire HEPA, que elimina el 99.97% de la contaminación de partículas y de manera efectiva todas las bacterias, así como otros contaminantes del aire de la cabina.
Una gran característica del Tesla Model S es su piloto automático, que le permite conducirse dentro y cambiar de carriles con solo pulsar una señal de giro y regular su rapidez a través del control de velocidad inteligente activo. El mando digital de motores, frenos y dirección ayuda a prevenir colisiones desde la parte delantera y lateral, por lo que evita que el automóvil se desvíe del camino. Gracias a este sistema, el vehículo también puede buscar un espacio libre y estacionarse en paralelo. Las características de piloto automático se incorporan progresivamente a través de las actualizaciones de software.
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Su motor doble es una mejora categórica para los sistemas convencionales de tracción en todas las ruedas. Con 2 motores, uno en la parte delantera y el otro en la trasera, el Tesla Model S controla de forma digital e independiente el par motor para las ruedas delanteras y traseras. El resultado es un control de tracción incomparable en todas las condiciones del terreno.
En su interior se encuentra una pantalla táctil de 17 pulgadas, que está orientada hacia el conductor e incluye modos de día y noche para una mejor visibilidad sin distracciones. Desde aquí se controlan la mayoría de las funciones del vehículo, la apertura del techo panorámico completamente de vidrio, la personalización de los controles de climatización automática. La pantalla, el tablero de instrumentos digital y los controles del volante combinan de forma perfecta con las funciones del reproductor multimedia, navegación, comunicaciones, controles del habitáculo y datos del vehículo.