Cada uno de los autos firmados por Rolls-Royce está diseñado con precisión para convertirse en un hogar en movimiento, personalizado hasta el más pequeño detalle para ser una extensión de su dueño. ¿Qué buscará el propietario del Arcadia Droptail? Nada más que paz.
Diseñado con meticulosa atención al detalle, Arcadia Droptail alaba la pureza de las formas, los materiales naturales y alcanza el punto más alto de la extravagancia silenciosa enfocándose en ser un santuario andante.
Rolls-Royce Arcadia es un santuario de paz y tranquilidad
El responsable de este pedido tiene afinidad por la arquitectura y el diseño, la pureza y la sutil moderación, de ahí que veamos un Rolls-Royce que a pesar de ser un símbolo indiscutible de lujo busca destilar toda su complejidad para revelar su esencia.
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Arcadia toma su nombre del reino mítico que en la Grecia antigua se traducía como ‘el cielo en la Tierra’, un lugar con incomparable belleza y armonía.
Si pudieran escoger una sola palabra que englobara todo su diseño sería minimalismo, un auto caracterizado por la reducción, la profundidad material y la tranquilidad.
También se tomaron como inspiración las regiones favoritas del cliente, incluidos los jardines tropicales de Singapur, Indonesia, Vietnam, así como la arquitectura británica, en donde se celebran las formas orgánicas y la honestidad de los materiales.
Sin embargo, todos estos conceptos e inspiraciones tenían que apegarse a los que el cliente había presentado como boceto dibujado a mano en 2019, lo cual constituyó un reto para los diseñadores de Rolls-Royce.
Como buen santuario el exterior tenía que ser una superficie limpia y monolítica luciendo un blanco sólido, pero estudiado más a fondo y bajo la luz natural tiene pequeños destellos de aluminio y vidrio, color plateado por las secciones inferiores y piezas completamente pulidas.
El reto detrás de crear el lujoso interior
Al interior se integró la madera Santos Straight Grain y su uso fue todo un reto debido a su sensibilidad, además de que requirió de un sistema de protección y un proceso de pruebas exteriores para asegurar la durabilidad de esta en los ambientes tropicales en los que se conducirá.
Los diseñadores quedaron completamente satisfechos después de 8 mil horas de desarrollo, en los que durante mil horas se rociaron muestras de madera, dejaron secar en la oscuridad y se expusieron al calor y luz brillante asegurando su resistencia.
La joya de la corona en el interior del Arcadia es un reloj concebido por Rolls-Royce Coachbuild, la pieza más compleja hasta ahora diseñada por la marca de la que solo el montaje tomó 5 meses precedidos por más de dos años de desarrollo.
Este reloj incorpora un exquisito patrón geométrico guilloché en metal en bruto con 119 facetas, un guiño a su 119 aniversario. La esfera del reloj especialmente diseñada también incluye agujas parcialmente pulidas y cepilladas y 12 “coronillas” (o marcadores de hora), cada una de solo 0,1 mm de grosor.
Para garantizar la legibilidad del reloj, los especialistas pusieron a cada corona un puente de relleno y las pintaron a mano utilizando una cámara capaz de ampliar una imagen hasta 100x.
Si bien cada cliente de Rolls-Royce es diferente, cada uno comparte una poderosa fuerza de convicción, y los requisitos de este individuo se establecieron claramente desde el principio. La importancia de conocer a sus clientes radica tanto en la ejecución exquisitamente minimalista como en la habilidad única de los diseñadores de Rolls-Royce para capturar su sensibilidad y alma en el Arcadia.