Buscamos todos los superlativos del diccionario pero no encontramos ninguno que sintetice lo maravillosa que es la versión dos puertas de la Clase S. Si alguien pensaba que los alemanes no podían hacer autos capaces de enamorar a simple vista, está muy equivocado, pues las líneas de este coupé seducen casi tanto como imponen.
El diseño del frente con apenas un toque de color contrastante en la fascia, la ausencia de poste B, la alta cintura… todos sus ángulos son fotogénicos. Ponerse al volante de este coupé es una experiencia sublime incluso antes de arrancar el motor.
Video Recomendado
El interior es ultra llamativo, con un diseño menos sobrio que el del Clase S sedán –especialmente con acabados en piel roja y costuras blancas-. Eso si, aunque los asientos traseros tienen espacio para dos adultos, estos no irán precisamente cómodos; pero nadie compra este auto pensando en viajar con la familia.
El desempeño no es el de un deportivo estrictamente hablando, pues este auto no se trata de eso; el Clase S Coupé la idea es ir rápido pero de una manera muy refinada, elegante. Mas no te engañes, si se lo pides, el V8 twinturbo te pegará al respaldo, haciendo el 0 a 100 km/h en solo 4.5 segundos. Sin embargo, lo harás en medio de un silencio sorprendente incluso cuando el motor ruge a fondo, lo que te dará la oportunidad de disfrutar de cada nota musical a través del impecable sistema de sonido Burmester.
Por: Pablo Olavarrieta