La emoción que provoca manejar un Aston Martin en cualquier terreno es enorme. Su elegancia impacta desde fuera y termina de encantar al conductor con la calidad de sus interiores. Esta experiencia será aún más sorprendente con el nuevo programa que invita a los fanáticos de la marca –sin importar su experiencia previa al volante– a explorar la potencia de varios de sus vehículos… sobre hielo.
El proyecto Aston Martin New Zealand on Ice se llevará a cabo del 22 al 28 de agosto en la Isla Sur, una de las más grandes del país, donde crearon instalaciones específicamente para este propósito. Habrá diez pistas de hielo donde un grupo de instructores profesionales guiarán a los invitados paso por paso en la experiencia de manejo. Podrán probar distintos modelos, entre ellos el más reciente en el portafolio de la armadora: el DB11.
El paquete incluye tres noches en el Millbrook Resort, Queenstown, donde los clientes serán recibidos con cócteles de bienvenida y al día siguiente comenzará la conducción en terrenos congelados. La aventura termina con un día libre para descubrir la vida cotidiana de Nueva Zelanda y una cena de clausura.
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Esta es una oportunidad única para realmente disfrutar de los vehículos en una de la locaciones más impresionantes del mundo. La asistencia será limitada, y el costo está disponible bajo solicitud en [email protected]