El último concepto eléctrico de Jeep se mueve más como un auto deportivo de alto rendimiento que como un todoterreno, aun así, este 4×4 mejorado de su concepto Jeep Wrangler Magneto está listo para conquistar cualquier camino.
El prototipo de SUV no se ve radicalmente diferente de su predecesor, pero hace algo que sin duda marca la diferencia: acelerar de cero a 60 mph en solo dos segundos.
Jeep Wrangler Magneto 2.0, la electrificación del 4×4
Al igual que el prototipo presentado antes del evento del año pasado, que fue el primer concepto totalmente eléctrico de Jeep, el Magneto 2.0 cuenta con un tren motriz totalmente eléctrico, alimentado por una batería de 800 voltios. A diferencia de la primera iteración, que tenía un motor eléctrico que producía 285 hp, la nueva versión tiene un motor eléctrico de flujo axial que puede generar 625 hp.
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Por supuesto el 4×4 está conectado a una transmisión manual de seis velocidades que envía potencia a las cuatro ruedas y ha sido diseñado para mantener el amperaje máximo por hasta 10 segundos, algo que la marca dice que es básicamente como ´óxido nitroso electrónico’, una característica que permite pasar de un punto muerto a 60 mph en sólo dos segundos.
Pero la salida no es la única diferencia entre las versiones 1.0 y 2.0 de Magneto. El chasis de la nueva versión se ha extendido 12 pulgadas para dejar espacio para el nuevo tren motriz y está equipado con un eje delantero Pro-Rock Dynatrac 60, un eje trasero Dynatrac 80, un eje de transmisión personalizado y una suspensión todoterreno.
También tiene un pilar B de fibra de carbono completamente nuevo, un kit de elevación de tres pulgadas y se monta en un juego de ruedas de 20 pulgadas envueltas en llantas todoterreno con nudos de 40 pulgadas. Finalmente, su carrocería de dos puertas está acabada en una librea única Surf Blue y White.
Si bien el Jeep Wrangler Magneto 2.0 ciertamente parece listo para la producción, no será el primer Jeep EV que salga de la línea de ensamblaje. El mes pasado, la marca compartió imágenes de un SUV a batería que aún no tiene nombre y que planea poner en producción el próximo año. Los detalles son casi inexistentes en este momento, pero todo apunta a que se basará en el crossover Compass.