Velocidad al límite, dominio de sí mismo, de su máquina y la habilidad necesaria para enfrentarse a las adversidades del clima y las que pueden aparecer en una pista de carreras. Desde hace muchos años, todo eso forma parte de la rutina habitual de Fernando Alonso. Luego de demostrar durante más de dos décadas su destreza al volante, especialmente en la Fórmula 1, ahora está listo para trasladarse del asfalto hacia un terreno muy distinto: las aguas del mar.
Eso sí, el histórico piloto español no lo hará para competir, sino para disfrutar de una faceta muy distinta a la que desempeña cuando se sube al auto, pues lo hará navegando su propio yate, comisionado especialmente a Sunreef Yachts con exigencias que configurarán una creación a la medida de los deseos de Fernando Alonso.
Regreso a Mónaco
Para comenzar esta nueva etapa, parece haber elegido un sitio con el cual ha establecido una relación especial a lo largo de su carrera como corredor de autos: Mónaco.
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Ahí ha conquistado la victoria en el Grand Prix en un par de ocasiones, con una singularidad: el legendario circuito vio al español subir a lo más alto del podio en 2006, con Renault, y en 2007, cuando formaba parte de la escudería McLaren. Gracias a ello, se convirtió en el primer piloto en obtener el triunfo en la carrera en dos años consecutivos con equipos distintos.
Además, en mayo del año pasado estableció también un nuevo récord como el hombre con más vueltas al circuito monegasco: en el Gran Premio de 2022 llegó a 1,262 recorridos, con lo que superó la marca anterior, que se mantuvo vigente durante 55 años y pertenecía al británico Graham Hill, quien acumuló 1,211.
Ahora es muy probable que el asturiano de 41 años aumente su presencia en Mónaco de manera considerable, pues regresará de manera más frecuente, pero no con el ánimo competitivo que lo distingue, sino con intenciones mucho más relajadas que las que lo acompañan cuando se dispone a recorrer las calles del principado a bordo de su monoplaza.
Incluso, no sería extraño que durante la mayor parte de sus visitas se mantenga alejado de las calles. Fernando Alonso planea establecer en aquel país la base de su yate, un catamarán 60 Sunreef Power Eco, y la decisión tiene tintes estratégicos, según explica él mismo: “Navegaré por la Riviera Francesa, Córcega y Cerdeña. Hablando en términos generales, el sur de Francia y el Mediterráneo serán la región por la que navegue, así que probablemente la base esté en Mónaco”.
El yate de Fernando Alonso
El dos veces campeón de Fórmula 1 oficializó su petición a Sunreef Yachts en septiembre pasado, precisamente en el Club de Yates de Mónaco. El proyecto comisionado por el piloto es un catamarán (embarcación distinguida por su doble casco) equipado con motores eléctricos y, como rasgo destacado, con el sistema de energía solar desarrollado por el propio astillero.
Por si fuera poco, también contará con baterías ultraligeras creadas a la medida por Sunreef y con un sistema de aire acondicionado que ahorra energía.
Todo lo anterior subraya un claro perfil ecológico, que se logra al fusionar tecnología amigable con el medio ambiente y un diseño sustentable, las características que describen mejor a la línea Sunreef Yachts Eco, en la que la marca se precia de concentrar las soluciones más vanguardistas de toda la industria en términos de navegación responsable.
Sobre sus motivos para elegir un barco de estas características, Fernando Alonso lo tiene claro: “El mundo se está moviendo en esta dirección. Somos más conscientes y queremos más sostenibilidad. Hemos visto cambios importantes en este sentido durante los últimos años en la movilidad global, y para mí es completamente lógico elegir un catamarán eléctrico. Esta clase de embarcación te proporciona un lazo más estrecho con el mar. El mundo se está haciendo más eléctrico cada vez y los yates también deben seguir esa dirección”.
Este será el primer yate para el piloto nacido en Oviedo, quien asegura que no tuvo dudas para elegir al astillero con el que cruzaría la puerta a este mundo que para él es totalmente nuevo: “Fue una decisión muy fácil. Sunreef Yachts es reconocido por su alta calidad y se ha ganado una gran reputación en las últimas dos décadas, su habilidad para combinar calidad y tecnología es impresionante”.
En cuanto a la decisión de adquirir este tipo de yate en vez de uno convencional, Fernando Alonso consideró razones prácticas: “Quería construir un catamarán para disfrutar más espacio y todas las ventajas que ofrece un buque con dos cascos”.
Dado que una de sus pretensiones era hacerse de un producto de auténtica sofisticación, acudir a Sunreef fue una decisión natural: “Esta compañía cumplía todos mis requerimientos en términos de espacio, experiencia en catamaranes, estilo de vida y lujo. Para mí fue muy simple”.
Para firmar el contrato de este nuevo proyecto con Fernando Alonso, estuvo el presidente de Sunreef Yachts, Francis Lapp.
“Estamos muy orgullosos de dar la bienvenida a Fernando a nuestra familia —asegura el también fundador de la compañía—. Comenzamos un viaje sensacional juntos con la construcción de este nuevo 60 Sunreeef Power Eco eléctrico. Estamos dando otro gran paso rumbo a una experiencia en yates más sostenible y estamos emocionados de hacerlo junto con un embajador sobresaliente e inspirador”.
Esta será la primera experiencia del piloto como propietaro de un yate, así que admite no estar del todo seguro sobre cómo será, pero tiene, sí, algunas expectativas que pretende cumplir: “Quiero que el yate siempre esté listo para zarpar. Habrá veces en que quiera salir al mar de manera espontánea, así que necesito un yate confiable. Sé que la tecnología que tendrá es muy compleja, pero también he visto todo el esfuerzo que Sunreef está haciendo, así que me siento confiado”.
El asturiano ha tenido tiempo incluso de visualizar la que podría ser su día perfecto navegando: “No comenzaría muy temprano, sería un día libre que comenzaría desayunando con mi familia y amigos a bordo. Luego nadaríamos y haríamos algunos deportes acuáticos. Después de comer, sería hora de relajarse, platicar y disfrutar el sol. El cierre sería una parrillada que prepararíamos nosotros mismos, para compartir también ese momento”.
Ésa, por cierto, es una de las tres condiciones esenciales que puso para este proyecto: una parrilla, un sistema de sonido de gran calidad y lo necesario para una buena variedad de juegos deportes acuáticos.
Esas características que delinean el estilo personal del catamarán, junto con la tecnología de punta de Sunreef, y su diseño atractivo y ecológico darán forma al vehículo con el que Fernando Alonso se prepara para iniciar una nueva etapa en su vida, que lo llevará del dominio del asfalto al placer de surcar los mares con un aliado ideal.
“Estoy emocionado de embarcarme en este proyecto: el 60 Sunreef Power Eco representa todo lo que busco: ingeniería de primera, una firma experta y un sorprendente producto amigable con el medio ambiente”. Así, darse una vida de príncipe será sencillo.